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El once sevillista posa antes del partido con el Granada junto a un grupo de niños. / Manuel Gómez
El Sevilla FC ha tirado claramente la Liga en los dos últimos meses de competición, en los que ha centrado todos sus esfuerzos en la Europa League, donde ha logrado eliminar al Basilea, Athletic y Shakthar para plantarse de nuevo en otra final, la tercera consecutiva, después de que en febrero dejara sellado el pase a la de la Copa del Rey al eliminar al Celta.
En el torneo de la regularidad, sin embargo, solo ha sido capaz de ganar un partido -el derbi al Betis- de los ocho últimos, empató otro -ante el Dépor- y perdió los seis restantes, frente a Real Madrid, Real Sociedad, Valencia, Sporting, Espanyol y Granada.
Esta racha de una sola victoria en ocho jornadas de Liga (1G 1E 6P) -desde que ganó 4-2 al Villarreal y se puso a cinco puntos de la zona Champions- se acerca mucho a las peores que vivió el equipo con Michel en la 2012/13 (1G 2E 6P) y con Marcelino en la 2011/12 (0G 2E 5P), con eliminación copera a manos del Valencia por medio y una nueva derrota luego en el debut de su sucesor, Míchel. En ambos casos, a los técnicos les costó la destitución. Pero esta vez Emery lo ha apostado todo a dos cartas al constatar que no tenía plantel para pelear con garantías en los tres frentes. Y ha salido ganador, o al menos finalista por partida doble y con la clasificación europea -el mínimo que se le pedía- asegurada.
Con el récord de la pasada campaña fue quinto
La pasada campaña el Sevilla también logró meterse en la final de la Europa League -y ganarla- y mantuvo el tipo en la Liga hasta el final, logrando establecer su récord de puntuación, con 76 puntos (los que sumó el Madrid para ganar la Liga 2006/07, con los mismos puntos que el Barça y cinco más que el Sevilla, 71, que la peleó hasta la penúltima jornada).
Los 76 puntos de la pasada campaña, sin embargo, no le dieron para clasificarse para la Liga de Campeones, pues el Atlético fue 3º con 78 y el Valencia 4º con 77. La plaza Champions la logró el Sevilla al ganar la final de la Europa League al Dnipro, lo mismo que deberá hacer este año para conseguirla, pues en Liga suma 52 puntos, 24 menos que la pasada campaña pero que le valen para tener asegurada la presencia en la fase previa de la Europa League al menos. Para no disputar dos rondas previas –la primera en julio- el Sevilla deberá ganar alguna de las dos finales, ya sea la de Copa del Rey al Barça o la de la Liga Europa al Liverpool, que en por liga no tiene ni aseguraba plaza para la Europa League.
La pasada campaña el Sevilla, de febrero a mayo, en Liga y Europa League, ganó 16 partidos, empató 5 y solo perdió uno (ante el Madrid). En la presente, tras el 4-0 al Celta en la ida de la semifinal de Copa, el Sevilla suma 7 victorias, 7 empates y 9 derrotas en todas las competiciones. Tiene 24 puntos menos en Liga que la pasada campaña, pero una final más que disputar. Y con un plantel claramente inferior, pues los recambios llegados no han hecho olvidar a Bacca y Aleix Vidal, principalmente, que dejaron un buen puñado de millones en caja. Gran mérito de Unai Emery, su entrenador, sin lugar a dudas.