La victoria del Sevilla frente al Celta ha puesto al rojo vivo la lucha por el tercer puesto de la clasificación. En estos momentos, el equipo de Jorge Sampaoli se encuentra empatado a puntos con el Atlético de Madrid, al que sonríe el goal average particular. Sin embargo, la sensación es que el Sevilla está levantando el vuelo, y de qué manera, tras superar su duro y costoso bajón.

Una de las razones que explican la mejoría experimentada por el conjunto nervionense es la presencia sobre el césped de dos futbolistas que han sacado a relucir la enorme calidad que atesoran: Paulo Henrique Ganso y Samir Nasri. Lo bueno para el Sevilla es que lo han hecho de forma determinante a la hora de lograr las dos victorias seguidas que lleva el equipo. Su calidad, por tanto, no se ha visto a cuentagotas, sino para desequilibrar partidos. Justo para lo que el club incorporó tanto al francés como al brasileño el pasado verano.

Hace dos jornadas, ante el Granada, Ganso volvió a jugar tras permanecer en el dique seco desde el pasado 4 de enero, día en que el Sevilla comenzó a despedirse de la Copa del Rey en el Santiago Bernabéu. El exjugador del Sao Paulo firmó los dos goles del Sevilla, siendo decisivo, por tanto, a la hora de que el equipo sumara tres puntos de oro. Goles... y fútbol de calidad al servicio de un Sevilla que, por fin, vio la mejor versión del brasileño.

Una versión que, aunque Ganso no marcó goles frente al Celta, fue valiosa de nuevo. Sampaoli decidió darle continuidad en el once titular y la respuesta volvió a ser positiva, algo fundamental porque este Celta no es el Granada, hundido en la zona de descenso. La afición no dudó en despedir a Ganso con una gran ovación cuando el técnico decidió sustituirle en la segunda parte.

Para entonces, Nasri ya estaba en el campo. Había permanecido de baja por lesión desde la derrota del Sevilla en el Camp Nou. Tres partidos sin él, aunque lo cierto es que su fútbol había desaparecido desde hace semanas. Sin embargo, su salida al césped frente al Celta se dejó notar. El francés pidió la pelota y comenzó a buscar huecos ante un adversario que se había replegado tras quedarse en inferioridad numérica. Hacía falta calidad para desbordar y Nasri sacó a relucir la suya. Una acción en la línea de fondo le permitió poner la pelota en el área pequeña para que Ben Yedder marcase el gol de la victoria.

Ganso y Nasri pueden ser determinantes en esta recta final de la temporada. El Sevilla necesita su talento para lograr el tercer puesto de la clasificación y ellos parecen decididos a reinvidicar su condición de estrellas.