Girona-Sevilla: un once B en busca de la cara A

Esto no sólo no para sino que anuncia curvas en los próximos días con la visita de la UD Las Palmas de Vitolo al Sánchez-Pizjuán el próximo miércoles y el posterior desplazamiento al Wanda Metropolitano para medir fuerzas con el Atlético de Madrid. Pero mal haría el Sevilla en pensar en todo eso y dejar de lado la cita de este domingo en el Municipal de Montilivi. Allí le aguarda el Girona, un recién ascendido cuyos dueños –el City Football Group que lidera Ferrán Soriano y el Girona Football Group de Pere Guardiola– quieren convertir este proyecto en protagonista.

Un 2-2 en casa ante el Atlético tras ir ganando 2-0, una victoria también como local sobre el Málaga (1-0) y una derrota en San Mamés frente al Athetic (2-0) permiten al conjunto entrenado por Pablo Machín afrontar un inicio de campeonato sin grandes urgencias. Cimentado por el bloque que logró el ascenso meses atrás y aderezado con un puñado de futbolistas cedidos por el City (Maffeo, Aleix García, Douglas Luiz, Kayode...), el Girona regresa a su feudo con la idea de poner al Sevilla contra las cuerdas tal como hizo en su debut liguero frente al equipo de Simeone.

Será, por tanto, una prueba tan interesante como seria para el equipo de Eduardo Berizzo, con caras nuevas en su once titular y bajas sensibles en la expedición. El técnico argentino ha convocado a 19 jugadores, entre los que no están Pizarro y Nolito, lesionados. Tampoco Jesús Navas, Nico Pareja, Kjaer y Escudero, a quienes da descanso por el desgaste acumulado. Las caras nuevas son Banega -tras cumplir sanción-, Carole y Borja Lasso, así como David Soria, que entra por Juan Soriano. También aparece Geis, ausente en el desplazamiento a Liverpool y con opciones de tener minutos.

Así las cosas, jugadores como David Soria, Corchia, Carriço, Carole –debutaría como sevillista–, Ganso, Franco Vázquez, Montoya o Muriel están llamados a ser protagonistas en un Sevilla que ha ganado dos de sus tres choques ligueros y ha empatado el otro, lo que le permite firmar un buen inicio de campeonato. Eso sí: todo el mundo sigue esperando ver un Sevilla más equilibrado, sin las dos caras del Coliseum o Anfield, por ejemplo, por lo que en Montilivi tendrá que fajarse si quiere lograr un buen resultado ante un rival con línea de atrás y decidido a adueñarse del balón también.

Toca, por tanto, estar muy despiertos y demostrar que las rotaciones, como se vio ante el Eibar, no suponen un bajón en el rendimiento. En definitiva: buscar la cara A, la mejor posible, con un once que bien podría definirse como B pero que no por ello debe rendir mucho menos.