Con este panorama, y dado que la derrota por 4-0 en Mestalla deja el goal average particular en manos del Valencia, el Sevilla se juega sus opciones el sábado. En cualquier caso, lograr una plaza entre los cuatro primeros exigirá una proeza.

En las diez últimas temporadas el Sevilla accedió tres veces a la Champions gracias a su clasificación en la Liga. Así, fue tercero en la 2008/09 y cuarto en la 2009/10 y en la 2016/17. Sus otras dos presencias en la máxima competición continental llegó gracias a la conquista de la Europa League en las campañas 2014/15 y 2015/16.

Actualmente, el conjunto de Montella mantiene abiertas dos vías para clasificarse: la Liga y la propia Champions, ya que ganar ésta, aunque sean palabras mayores, otorga la participación en la siguiente edición como defensor del título. Ya que, siendo realistas, esta segunda opción no entra en los planes, todas las miradas se dirigen al campeonato nacional.

Repasando la trayectoria del Sevilla en las diez últimas temporadas, sólo en una de ellas logró clasificarse para la Champions estando fuera de los cuatro primeros puestos a estas mismas alturas, disputada la jornada 27ª. Fue en la 2009/10. Por entonces, el equipo de Nervión ocupaba el quinto puesto con 44 puntos, a dos de distancia de la zona Champions, y terminó la temporada con 63 en el cuarto puesto gracias a un gol de Rodri en Almería, en el tiempo de prolongación del último partido de la última jornada.

Aquella escalada épica en la que el Sevilla culminó con éxito su remontada no ha vuelto a repetirse. Desde entonces, todos los intentos por acceder a la Champions merced a la clasificación liguera han sido infructuosos. La vez que más puntos logró recortar al cuarto fue en la temporada 2010/11, cuando estaba a doce de distancia en la jornada 27ª y terminó a cuatro y en el quinto escalón. Así pues, el choque del sábado se antoja vital.