La chistera de Sampaoli

El Sevilla ha sumado 17 puntos en la Liga gracias a los goles de los jugadores inicialmente suplentes

26 feb 2017 / 20:38 h - Actualizado: 27 feb 2017 / 20:05 h.
"Sevilla FC","Iborra","Sarabia","Sampaoli"
  • Carlos Fernández celebra el tanto de la victoria ante Las Palmas en Nervión. / Manuel Gómez
    Carlos Fernández celebra el tanto de la victoria ante Las Palmas en Nervión. / Manuel Gómez

Cuando Jorge Sampaoli arribó a Sevilla el verano pasado empezó a difundir un discurso basado en las formas más que en el fondo, el resultado. Ganar pero no de cualquier manera. Pasados seis meses, el Sevilla gana mucho más que pierde, hasta el punto de estar a ritmo de récord histórico –ya ha igualado los puntos de la temporada pasada: 52–. Hasta la fecha, el Sevilla ha vencido de diferentes formas: arrollando, con sufrimiento hasta la última jugada o valiéndose de su pegada en partidos igualados e incluso de varias dosis de suerte. Pero no pocas veces lo ha hecho mutando, modificando su dibujo, intentando darle la vuelta a los partidos que se le atragantaron. Una de las facetas más importantes en un entrenador de fútbol. Y ahí surge la chistera de Sampaoli, cuya mano se ha notado de forma contundente en casi una decena de partidos.

El dato es tan inusual como definitivo si alguien duda: 17 puntos ha sumado ya el Sevilla con goles marcados por jugadores inicialmente suplentes pero introducidos durante el partido por Sampaoli. Cifras que afloran contando sólo los tantos que fueron decisivos –Vitolo, por ejemplo, cerró el triunfo ante el Eibar hace poco más de una semana anotando el 2-0 en el 91’ cuando apretaban los azulgranas en Nervión–. Estos números se conjugan a la perfección con otros no menos elocuentes: el Sevilla es, con enorme diferencia, el equipo de la Liga que más puntos conquista en los últimos diez minutos ( también 17). En este sentido cabe destacar la labor de Juanma Lillo, técnico ayudante de Sampaoli y con el que el argentino consensúa prácticamente todos los movimientos.

El encuentro que mejor le salió al Sevilla en este sentido fue contra Las Palmas en Nervión, con dos goles de Sarabia y Carlos Fernández para darle la vuelta al 0-1 que llevaba el equipo canario. En Leganés y La Coruña (2-3 en ambas ocasiones), los tantos in extremis de Sarabia y Vitolo, respectivamente, justificaron la apuesta de Sampaoli por ellos en la segunda parte. Algo parecido sucedió en el Sevilla-Madrid, cuando Jovetic marcó el definitivo 2-1 (había entrado en el 69’). A Las Palmas se lo volvió a hacer Sampaoli en tierras canarias, dando entrada a Correa para cambiar su apuesta ofensiva y anotando éste el único gol del partido (0-1). En la locura de Pamplona ante el Osasuna (3-4), el Sevilla finalmente logró sacar tres puntos de El Sadar gracias al postrero tanto de Sarabia, quien jugó los últimos 25 minutos. El derbi en el Villamarín solidifica esta gran virtud de Sampaoli, quien logró variar el destino del partido modificando la banda derecha y cambiando las formas de atacar al Betis tras el descanso. Iborra marcó el 1-2 y casi fue el autor del 1-1, remachado por Mercado.

El capitán del Sevilla (4 tantos partiendo desde el banquillo), junto a Sarabia (3 y gran parte del mérito del autogol de Sergio Ramos en el 2-1 al Madrid), es el gran protagonista del Sevilla en este sentido. El valenciano protagonizó el último de los partidos que queda por analizar en esta lista: el contundente 0-3 al Celta en Balaídos. Iborra fue el autor del triplete de goles habiendo saltado al césped tras el descanso.

Pero como casi todo en la vida, hay un lado negativo. El hecho de que las reacciones de Sampaoli suelan tener éxito va irremediablemente unido al hecho de que sus apuestas iniciales no siempre triunfan, pues su habilidad para modificar piezas no se limita al simple cambio de cromos, sino a un giro en el dibujo o en la estrategia, como sucedió en el Villamarín. Si Iborra y Sarabia cumplen a la perfección el rol de jugador número 12 del Sevilla, hay otros futbolistas a los que el técnico echa de menos en el armario. Ganso no arranca y Vietto parece haber gripado, mientras que Correa parece al fin despertar. Pero los resultados mandan y los consiga gracias al plan inicial o a su poder de reacción, el Sevilla de Sampaoli es ganador.