«Ni Monchi ni el Sevilla han tocado techo aún y deben hacerlo juntos»

José Castro insiste en que lo mejor para el Sevilla está por llegar: «A este ritmo de crecimiento quién sabe si podemos llegar a 200 millones de presupuesto»

19 dic 2016 / 17:32 h - Actualizado: 20 dic 2016 / 14:38 h.
"Sevilla FC","José Castro"
  • José Castro, antes de la junta. / Manuel Gómez
    José Castro, antes de la junta. / Manuel Gómez

El discurso del presidente del Sevilla, José Castro, inauguró la junta de accionistas de la entidad nervionense. El presidente hizo balance de la temporada 2015/16, excelente en casi todos los sentidos: «Comparezco un año más con plata a mi izquierda y con un ejercicio sobresaliente, tanto en lo deportivo como en lo económico. Hemos logrado levantar nuestra quinta Europa League, algo impensable al comienzo del presente siglo. Llevávamos 58 años sin ganar nada, generaciones de sevillistas no habían visto ni una final, y desde Eindhoven llevamos nueve títulos. Nuestro modelo es el de siempre: vender ante ofertas irrechazables y comprar con acierto. Gracias a las ventas de jugadores como Bacca pudimos construir otro equipo competitivo, gracias a la labor de Monchi, el matiz diferenciador que nos hace únicos».

En este sentido, se esperaba con interés alguna referencia de Castro a la petición de salir del propio Monchi. Y no defraudó el presidente: «En cuanto a la temporada pasada hay que subrayar el nombre de dos personas. Primero Monchi, que pidió salir. Fue la situación más complicada como presidente. Fui presidente antes que amigo de Monchi, esa es mi obligación y así actuaré siempre. Después llegó la calma y sigue haciendo su trabajo como sólo él sabe. Es parte intrínseca de este club, participa en todos los órganos de decisión y tenemos que lograr que siga aquí motivado. Ni Monchi ni este Sevilla han tocado techo todavía y deben hacerlo juntos». El segundo nombre al que se refirió Castro fue el de Unai Emery, «leyenda de Nervión que siempre tendrá el reconocimiento de este consejo, no hay nada que reprocharle tras protagonizar una de las etapas más gloriosas de la entidad». Puntualizó Castro que Jorge Sampaoli «era la mejor forma de inyectar sangre nueva en el club. Ha sido muy discutido pero él marca la diferencia, las expectativas son muy altas».

Siguió el máximo mandatario nervionense relatando sobre el modo de proceder del Sevilla: «El dinero lo ponemos en el campo y no es palabrería, se demuetsra con las cuentas que presentamos. Para crecer lo fundamental es un equipo competitivo en el terreno de juego, sabiendo conjugar la prudencia y el atrevimiento, apostar con cabeza pero siendo atrevidos, y ahí están los resultados». Castro recordó además los vaivenes de la temporada pasada y cómo finalizó la misma: «Pasamos momentos complicados pero siempre confiamos en nuestras posibilidades. El tiempo nos puso en nuestro sitio: aunque no pudimos pasar en el grupo de la muerte de la Champions, sí ganamos la quinta Europa League y en la Copa nos plantamos en otra final, además de remontar en la Liga tras un mal comienzo. El mes de mayo volvió a ser el mes del Sevilla y en Basilea derrotamos a todo un Liverpool que nos triplicaba el presupuesto y el número de aficionados, para acto seguido sólo caer ante el Barça en la prórroga de la final de la Copa».

Otro tema fundamental en el discurso de José Castro fue la afición. Le dedicó el presidente una serie de halagos más que fundamentados, avisando de que las ayudas en viajes para finales y otro tipo de reconocimientos a la hinchada seguirán en el futuro. Pero también dejó claro un mensaje respecto a puntuales actos violentos y a los insultos durante los partidos: «Sufrimos multas de cientos de miles de euros, nos está constando eliminar los insultos y no cejaremos en el empeño. Debemos tener claro que cada descalificación nos perjudica, ese no es el camino de una institución como el Sevilla FC. No es criminalizar a una parte de la grada, sino evitar el perjuicio para nuestro club. No nos callaremos ante agravios comparativos, que quede claro, pero no toleraremos la incitación a la violencia. Somos referente de cómo animar a un equipo en el estadio y tenemos que serlo también en este aspecto».

Para finalizar, hay que destacar un mensaje claro de Castro respecto a la unión, palabra clave en su política presidencial. «Por muy bien que se trabaje los grandes retos se consiguen con unión. Quiero que se me recuerde por ser un presidente de unión. Sin eso no se puede lograr nada, que quede claro. Hay que ir todos de la mano, lo recuerdo hoy aquí porque en la temporada pasada hubo rumores sobre mal ambiente en el vestuario y quedó patente que no tenía nada de cierto, es más, sirvió para fortalecer el ambiente. Y la temporada acabó bañada en plata porque estuvimos unidos. También se impuso la unión y el interés común en algunas disputas accionariales que hubo antes de la pasada junta. También se impuso la cordura y el sentido de unión, que es el que debe marcar el camino: todos a una».