El cierre de mercado de fichajes se aproxima y el Sevilla trabaja con la intención de reforzar su plantel. Hasta el momento han llegado nueve jugadores (Sarabia, Kranevitter, Ganso, Kiyotake, Vietto, Ben Yedder, Mercado, Franco Vázquez y Correa) pero Jorge Sampaoli y la dirección deportiva consideran que sería bueno apuntalar el proyecto con algún que otro refuerzo más.

El propio técnico dejó entrever antes del debut liguero su deseo de que lleguen hasta cuatro futbolistas. «Volvemos a tener el conflicto de no contar con centrales. Quizá alguien para el medio, arriba... Y sólo tenemos un portero. Ojalá pueda llegar algún jugador que pueda reforzar a este equipo y nos permita afrontar bien Champions y Liga. Vamos a ver si el club puede afrontarlo. No es una exigencia del cuerpo técnico, sino que sería una decisión en común que nos daría más opciones. Si no viene alguien, nos arreglaremos con lo que tenemos», dijo Sampaoli.

A día de hoy, según ha podido saber El Correo, la intención del Sevilla es incorporar, en principio, a dos efectivos: un guardameta y un jugador para el centro del campo. El central y el delantero quedan como opciones secundarias que, salvo cambio de planes, tendrán que esperar su momento. Una de las prioridades es la portería. Pese a contar con Sergio Rico y David Soria, Sampaoli entiende que necesita un guardameta. El madrileño se ha lesionado para unas semanas y por el momento su lugar en el banquillo lo está ocupando José Antonio Caro. El técnico se ha decantado inicialmente por Rico para la titularidad. En cualquier caso, las gestiones realizadas para contratar a un portero responden a una idea clara: ganar experiencia en esa demarcación.

El elegido es Salvatore Sirigu, guardameta de 29 años con bagaje en competiciones como la Liga de Campeones (30 partidos) o con la selección italiana (17), para un total de 308 encuentros oficiales a sus espaldas (190 con el PSG, 80 con el Palermo, 23 con el Cremonese y 15 con el Ancona). La idea del Sevilla es que llegue cedido, aunque por ahora se sigue esperando el acuerdo oficial con el club parisino.

Paralelamente, la entidad nervionense trabaja pensando en el centro del campo. Sampaoli considera también necesario reforzar la zaga, por lo que un jugador que pudiera desenvolverse en ambas zonas del campo tendría ventaja. Y es ahí donde podría entrar, por ejemplo, Rodrigo Caio, un central que también sabe lo que es desenvolverse como pivote en la línea medular.

Caio viene de ser campeón con Brasil en los Juegos y ayer viajó a Italia para tramitar su pasaporte, lo que le habilitará para ser inscrito como comunitario. El problema para el Sevilla es que el Sao Paulo ha pedido siempre mucho más dinero del que ofreció el club de Nervión, y Caio tiene muchos pretendientes. No se antoja fácil su incorporación, pero tampoco es imposible. Por si acaso, hay, lógicamente, alternativas que el club maneja con sigilo y que en breve deben salir a la luz.