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Antonio Puerta celebra el gol en las semifinales de la UEFA de 2006 ante el Schalke. / Javier Díaz
El 28 de agosto siempre será una fecha señalada para el sevillismo que ocho años después sigue recordando a Antonio Puerta como uno de los jugadores inolvidables que han defendido la camiseta del club de Nervión.
Hoy más que nunca el mundo del fútbol recuerda al jugador nacido en el barrio de Nervión y que en el Sevilla consiguió cinco títulos y marcó el gol que cambió la historia del club en las semifinales de la UEFA de 2006 en las que lograron eliminar al Schalke y plantarse en la final de Eindovhen para golear al Middlesbrough.
Su desaparición fue capaz de unir a las aficiones de Sevilla y Betis en un homenaje sin precedentes y su espíritu sigue vivo en cada derbi sevillano que disputan los dos equipos de nuestra ciudad.
No obstante, el recuerdo del jugador sigue vive durante los 365 días del año en el corazón del sevillismo y en el Ramón Sánchez-Pizjuán cuando le homenajean en el minuto 16 de cada partido.
Puerta también será protagonista en el nuevo diseño del estadio sevillista, que llevará su silueta en la puerta 16 y a buen seguro será uno de los elegidos para aparecer como uno de los jugadores históricos del club junto al mosaico de Preferencia.