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Jorge Sampaoli arenga a sus pupilos en un encuentro de la Universidad de Chile. / EDD
Jorge Sampaoli se ha ganado, por méritos propios, el rol de héroe en un Sevilla FC intratable en Liga y en la antesala de un combate de alto voltaje en la Copa del Rey ante el Real Madrid de Zinedine Zidane. El técnico del SFC tratará de consagrarse en el torneo del KO, el certamen que hasta ahora es sinónimo de experiencia efímera en su carrera. Antes de aterrizar en Chile, el de Casilda dirigió a Juan Aurich, Sport Boys, Coronel Bolognesi y Sporting Cristal en Perú y a Emelec en Ecuador, formaciones con las que jamás participó en un evento similar a la Copa del Rey. Posteriormente buscó alzar un título a través de la vía copera, aunque con O’Higgins y Universidad de Chile el límite siempre fueron los octavos de final.
Su primera aventura en un torneo del KO fue en el ejercicio 2007-08, en el que intervino en la Copa de Chile con O’Higgins. Exento de la primera ronda por normativa, en la segunda criba apeó a Curicó Unido, de Primera B, equivalente a Segunda División. Ya en octavos, su enemigo fue Huachipato, que se cobró sus esperanzas de éxito a partido único (2-1). En la 2008-09, Sampaoli repetía en O’Higgins, que claudicó en 1/16 de final ante Unión San Felipe, de Primera B y que a la postre se proclamó campeón. Tras abandonar O’Higgins, el actual preparador del Sevilla FC emigró al Emelec de Ecuador, donde, debido a la estructura competicional, no existe la Copa.
En su regreso a Chile, el país en el que protagonizó los mayores éxitos de su carrera, Sampaoli recobró el pulso copero en la campaña 2011-12, en la que trató de recuperar el prestigio perdido de Universidad de Chile. La ‘U’ triunfaba en Liga y en la Copa Sudamericana, aunque en el certamen del KO los éxitos eran vestigios del pasado. En 2012 fue eliminado en primera ronda bajo el formato de liguilla, mientras que la etapa más curiosa fue la 2012-13. Campeón de Liga y de la Copa Sudamericana, el segundo torneo en orden de relevancia a nivel continental, Sampaoli se conjuró para ganar la Copa. «Es mi deseo», dijo en una entrevista concedida a El Mercurio. Sin embargo, una repentina oferta de la Selección chilena se interpuso en su camino.
La ‘U’ despidió con honores y en un abarrotado Estadio Nacional a Sampaoli después de eliminar en octavos de final a Universidad de Concepción. Aquella noche, el argentino arengó a sus discípulos y les encomendó ganar el único entorchado que no figuraba en su hoja de ruta. Universidad cumplió con creces y se impuso en la finalísima, con el argentino Darío Franco en el banquillo, a Universidad Católica.