El madrileño vuelve a Getafe, su casa durante cinco campañas, y habla de su trayectoria en el Sevilla FC, su crecimiento y la actual temporada, tanto a nivel individual como colectivo, dejando claro que a día de hoy se centra en lograr el objetivo de la cuarta plaza, «lo que todos los sevillistas queremos»
Pablo Sarabia vive uno de sus mejores momentos desde que llegó al Sevilla FC en 2016. El madrileño vuelve este domingo a la que fue su casa,el Coliseum Alfonso Pérez. En declaraciones a los medios oficiales, repasó tanto esta etapa en Nervión en global como la actualidad al más corto plazo. Sobre el aumento de su protagonismo en el equipo, lo asume con naturalidad: «Creo que todos los jugadores maduran, al final unos antes y otros después y se aprende mucho con el paso de los partidos y todas las situaciones que se dan. Al final te vuelves más maduro y mejor jugador».
Si algo ha sabido explotar es su capacidad para protagonizar las jugadas de gol: «Me voy encontrando mejor en el campo. En el esquema de Machín estaba más cerca del área y yo que disfruto con las jugadas de gol, se ven más cerca. Con Caparrós también, pero lo importante es que todos esos números han permitido crecer al equipo». De hecho, no se conforma con sus actuales guarismos: «Intento mejorar siempre, exigirme lo máximo para que el día de mañana no me quede nada dentro ni piense que pude hacer más. Se me están dando bien las cosas pero quiero más e intento mejorar estas cifras».
Además, reconoce que haber pasado por tantas demarcaciones le ha hecho mejor futbolista: «En años anteriores, una de las cosas más importantes que hice fue jugar en distintas posiciones porque de cada una se pueden aprender y mejorar cosas para ser mejor jugador». Volviendo atrás, si tiene que quedarse con algo es con la pasada Liga de Campeones: «En lo colectivo el año pasado, en Champions contra el Bayern, fue un momento dulce con dos partidos muy completos, aunque no pudimos avanzar de fase. Personalmente me quedo con este año, porque me estoy encontrando muy bien». Y preguntado por lo más complicado, aún lo tiene muy reciente: «Los más duros son las eliminaciones, porque tengo mucho carácter y no me gusta perder. Me fastidió y me dolió mucho lo de Praga. Son momentos en los que hay que levantarse, pero el golpe queda ahí».
Tras un mal inicio de 2019, Sarabia también quiso dar su punto de vista del tan comentado bajón: «Influyen muchos aspectos. Llevábamos muchos meses compitiendo y se sabía que iba a haber una bajada. Quizás se prolongó más de lo debido, pero el equipo no dejó de dar la cara. Hemos tenido algunos palos de los que levantarse también en lo anímico y hay que quedarse con que eso ya ha pasado. Hemos enlazado varios partidos ganando y con eso nos tenemos que quedar».
El madrileño lo ve con naturalidad y apuesta por terminar de hacer bueno lo de la primera vuelta: «Si analizas todos los equipos de Primera, todos pasan por bajones antes o después. En dinámicas negativas todo sale mal y se vuelve en contra, como al contrario cuando estás en dinámica positiva. Hay que entenderlo porque son cosas del juego, de la temporada y con lo que nos quedamos es con la gran primera vuelta. Conseguimos muchos puntos y ahora tenemos que culminarlo para que todo este trabajo haya merecido la pena».
Esa mala dinámica conllevó la salida de Pablo Machín: «Siempre que hay un cambio de entrenador te afecta. A mí me parece buen entrenador, estábamos a gusto y la racha es verdad que no era la mejor, pero con Caparrós se está viendo que hemos vuelto a la buena dinámica». Algo que comenzó nada más volver de la República Checa: «Sabía que este momento iba a llegar. El equipo, como venía, tenía que tener un punto de inflexión. Llegó en Praga y estamos muy contentos de que se haya podido reaccionar».
De hecho, la cuarta plaza es de nuevo sevillista: «Éramos conscientes de la dificultad porque están siendo victorias con rivales directos que tiene más mérito aún. Podría haber salido muy bien o muy mal y el equipo ha demostrado potencial para sobreponerse en situaciones adversas. Queremos seguir así para que los meses de enero y febrero queden en una anécdota». Pero para ello hay que dar la cara en Getafe, plaza que Sarabia conoce a la perfección: «Jugué allí cinco años. Sé la dificultad que tiene ese campo y el equipo que saca algo de allí es sufriendo y haciendo las cosas muy bien. Es un rival inesperado ahí arriba pero demuestran que hacen las cosas bien. Llevan mucho tiempo ahí y eso no es fácil. Nuestro objetivo es conservar ese cuarto puesto».
Sarabia llegó de la mano de Monchi y su regreso, lógicamente, le hace feliz: «Le estoy muy agradecido porque me trajo aquí. Se fue y fue un palo para todos. Nos quedamos con esa sensación de soledad porque es muy cercano, aparte del gran trabajo que hace. Estamos muy contentos de que haya vuelto, porque sabemos de su importancia en lo personal y lo profesional».
Asimismo, preguntado por su futuro, aparca el tema hasta que termine la campaña: «Lo he dicho en muchos medios. Me quiero centrar en conseguir el objetivo esta temporada aquí. Me estoy encontrando bien y el año que viene tendré que tomar decisiones. A día de hoy me centro en la cuarta plaza que es lo que todos los sevillistas queremos».