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Jorge Sampaoli, en sala de prensa, este sábado. / Manuel Gómez
Jorge Sampaoli quiere que su equipo retome el campeonato dando la cara también en Balaídos, donde espera el Celta, un rival difícil y ante el que habrá que ofrecer el mejor nivel.
«Estamos ilusionados por el escenario, por el rival y por tratar de seguir trabajando de la misma manera. El partido va a ser muy difícil, muy interesante para nosotros. Nuestra obligación en mantenernos arriba, con el nivel de motivación alta. Esperamos tener una buena tarde. El Celta va a ser un rival complejo. Lo está haciendo muy bien en su casa. Tenemos que estar a la altura; si no, sufriremos. Es un equipo que se conoce mucho, saben a lo que juegan. Vamos a tener que estar muy bien si queremos pasar una buena tarde. El Celta quiere protagonizar. Presiona mucho en el centro del campo. En lo táctico va a ser interesante. Muchos equipos fuertes no lograron ganar allí», explica el técnico.
Respecto a los efectivos que tendrá a sus órdenes, Sampaoli, con Mariano y Escudero tocados, dice: «Estamos viendo cómo evolucionan. Dependerá de ellos también. En las bandas estamos un poco limitados y necesitamos jugar, aun tratando de llevar el control del partido, sin perder la profundidad, que es algo que nos está faltando en los últimos encuentros».
Por otro lado, se refirió a la sanción de dos partidos en la Liga de Campeones: «Estoy amargado por lo que me tocó, pero es mi responsabilidad. No sabía la normativa, pero viendo el reglamento asumo el castigo por mi expulsión».