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Los jugadores del Sevilla, en el entrenamiento de ayer. / J. L. Montero -
Esta noche, ante el Olympique de Lyon, el Sevilla deberá hacer buenas las drásticas rotaciones efectuadas por Jorge Sampaoli en las dos últimas salidas. Se trata de un partido señalado claramente en el calendario del equipo nervionense, que ha fijado –especialmente su entrenador– la Champions League como competición prioritaria. Sin embargo, el Sevilla llega en un mar de dudas. Y eso que acaba de cosechar su primera derrota liguera, tras seis citas. Sin embargo, esta no ha hecho sino incrementar la incertidumbre que dejaba el equipo a pesar de las victorias en casa y los empates fuera. No se sabe bien para dónde va a tirar el proyecto de Sampaoli. El técnico está evolucionando a marchas forzadas. De su discurso grandilocuente y el primer partido ante el Espanyol, su Sevilla ha pasado a ser un equipo con notorias dificultades para hacerle daño a los rivales y especialmente plano de visitante.
Ese contraste entre lo anunciado y lo demostrado pone en el punto de mira al preparador argentino, que proyecta la imagen de un entrenador que se está dando cuenta de que lo que tramaba es difícilmente convertible en realidad con las armas que posee. Hoy tirará de todo su arsenal para meterle mano al correoso Olympique de Lyon, llamado a ser el rival directo de los sevillistas por la segunda plaza del grupo H de la Liga de Campeones –adjudicándole, a priori, la primera a la Juventus–. Para ello descansaron en Bilbao hombres importantes que hoy serán de la partida: Sergio Rico, Escudero, N’Zonzi, Franco Vázquez, Vitolo y Vietto. Y para ello Sampaoli apretará las tuercas en busca de más presencia ofensiva.
No habrá doble pivote en el centro del campo, como ante el Betis –N’Zonzi e Iborra– y frente al Athletic –Kranevitter e Iborra–. Jugará el francés solo, escoltando a Vázquez y a un Nasri en evidente progresión. Los riesgos ante un equipo con peligrosas y rápidas salidas como el Olympique serán evidentes, sobre todo con imprecisiones en las jugadas de ataque, a las que Sampaoli quiere dar más velocidad. No llega el Lyon en su mejor momento: cayó en casa del Lorient (1-0) y sólo ha ganado dos de los últimos seis partidos. Rafael, Jallet y, sobre todo, Lacazzette, son bajas de consideración.