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Vista aérea del Estadio Olímpico de Roma, sede de los partidos de la AS Roma.
Ocho equipos sobreviven en la Champions League y entre ellos quedarán este viernes emparejados para que sólo resten cuatro a mediados de abril. Dos ingleses, dos italianos, un alemán y tres españoles serán los que luchen por ganar el mejor torneo del mundo por clubes en Kiev el próximo mes de mayo. El sorteo de los cuartos de final se celebrará a las 12.00 horas en la sede de la UEFA, en Nyon (Suiza). Juventus, Liverpool, Manchester City, Real Madrid, Barcelona, Bayern de Múnich, Sevilla y Roma son los equipos que estarán en el bombo y que llevan ya tiempo haciendo sus cábalas previas. Preferidos, rivales a evitar, viajes atractivos, buenos y malos recuerdos, estrenos, prestigio, reencuentros. Y de ese agitado cóctel brota un nombre por Nervión: Roma.
La AS Roma es el rival preferido por el Sevilla, al igual que el equipo nervionense es el deseado por todos los demás. El equipo italiano, diseñado por Monchi y en el que juegan los exsevillistas Fazio y Perotti, reúne todos los condicionantes para ello: es el equipo menos bueno de todos los posibles, Roma es uno de los destinos más atractivos del mundo, a la vez que cercano y no muy caro (en referencia a la afición), y uno de los equipos importantes de Europa ante el que el Sevilla aún no se ha enfrentado en partido oficial (sí lo hizo el pasado agosto en el Trofeo Antonio Puerta, con victoria por 2-1).
Del resto de posibles contendientes, el Sevilla ya se ha enfrentado en algún momento de su historia en alguna competición europea a Juventus, Liverpool, Manchester City, Barcelona y Real Madrid. Con el Bayern ocurre igual que con la Roma: no hay precedentes oficiales entre ambos pero sí un amistoso en el Ramón Sánchez-Pizjuán a modo de presentación de Diego Armando Maradona a finales de 1992 (3-1).
La Roma, tercera de la Serie A en dura pugna con su eterno rival (Lazio), tiene mayor potencial económico que el Sevilla pero en Nervión ven al equipo romano como un igual ante el que el pase a las semifinales estaría al 50 por ciento. En el siguiente vagón de preferencias aparecen equipos como Liverpool o Juventus, dos grandes de Europa a los que ya ha derrotado el Sevilla antaño. Esta temporada, los de Jurgen Klopp (al que se le da horrible enfrentarse al Sevilla) empataron dos veces con los hispalenses en la fase de grupos (2-2 en Anfield y 3-3 en Nervión), aunque demostraron que su estilo vertiginoso de juego y su potencial ofensivo no es el más idóneo para los intereses sevillistas. Estos se adecuan más al de una Juve muy veterana y que, pese a liderar la Serie A con los goles de Higuaín, la magia de Dybala y su rocosa defensa, no es la de temporadas pasadas y posee un juego más lento y, por tanto, más controlable por el Sevilla.
El resto son rivales no deseados, sobre todo Real Madrid y Barcelona, por el propio hecho de ser españoles y estar habituados a jugar contra ellos todos los años (si Barça y Sevilla quedan emparejados jugarían cuatro veces casi seguidas al unir estos dos compromisos al partido liguero del 31 de marzo y a la final de la Copa del Rey el 21 de abril) y, sobre todo, por ser los dos mejores clubes del mundo. Sin tanto pedigrí pero con un potencial similar y un estado de forma incluso más potente está el Manchester City de Pep Guardiola, quien en su segundo año en Inglaterra ha conformado un bloque repleto de jugadores talentosos y convencidos de su idea: posesión exhaustiva, movimientos continuos y una presión tras pérdida que le hace ser casi inabordable. En la categoría de grande de Europa por historia y potencial sí entra un Bayern de Múnich capitaneado por Jupp Heycknes a sus 72 años. El alemán sucedió a Ancelotti en octubre y sólo ha perdido un encuentro desde entonces (28 partidos, 26 victorias), recuperando para la causa a veteranos como Robben o Ribery, que siguen entendiéndose bien con Lewandowski y Muller.
A diferencia de lo que sucede en los octavos, la configuración de los cuartos carece de barreras. Será un sorteo puro en el que pueden coincidir todos los equipos. De los ocho clubes en el sorteo, el Sevilla es el de menor potencial económico (unos 200 millones de presupuesto), por detrás de los dos italianos (Juve y Roma con casi 400) y muy lejos de los más de 600 de Barcelona y Real Madrid y también de equipos multimillonarios como el PSG, el Bayern o el Manchester City. Los partidos de ida se jugarán entre el 3 y el 4 de abril y los de vuelta entre el 10 y el 11 del mismo mes.