Airbus reajustará 850 empleos en España por el A400M y el A380

El descenso en la producción del avión militar A400M y del superjumbo A380 afectará en España a 850 trabajadores de Airbus, si bien la mayor parte del impacto laboral recaerá sobre las dos plantas sevillanas del grupo, San Pablo y Tablada, pues son las que concentran el grueso de actividad del programa A400M. Entre ambas suman cerca de 2.000 trabajadores.

El constructor aeronáutico se reunió ayer con el comité intercentros europeo, al que informó de que la reorganización productiva afectará «como máximo» a 3.700 trabajadores en cuatro países: España, Francia, Alemania y el Reino Unido. Así, las plantas españolas asumirán el 23 por ciento del reajuste laboral del grupo, mientras que afectará a unos 1.900 empleados en Alemania, y en torno a medio millar tanto en las factorías francesas como en las británicas.

Airbus no concretó cuántos empleos se perderán ni cuántos puestos podrán ser recolocados, pero sí mostró su intención para mitigar al máximo el impacto sobre la plantilla, de manera que iniciará un programa de recolocaciones durante un periodo de tres años por el que tratará de mover a la mayor cantidad de trabajadores posible a otras divisiones del negocio y a otras plantas productivas, puntualizaron fuentes de la empresa.

Airbus puso de relieve que gestiona cada año un índice de movilidad interna de un 12 por ciento «y tiene la posibilidad de adaptar el grado de flexibilidad a través de sus divisiones, funciones y filiales para apoyar la recolocación del personal en otras actividades».

El reajuste también se dejará sentir sobre las factorías españolas de Getafe (Madrid), Illescas (Toledo), Puerto Real y CBC de El Puerto de Santa María, en Cádiz. En total, la plantilla española de Airbus en sus negocios civil y militar asciende a 12.60 trabajadores. Fuentes de Airbus, no obstante, precisaron que la mayor parte de ellas –diez factorías– podrán reorganizarse de forma interna, aunque sí será necesaria la adopción de medidas consensuadas con los sindicatos en las plantas de San Pablo y Tablada, así como en las de Bremen, Augsburgo y Filton.

A partir de ahora se inicia un proceso de interlocución social con los representantes de los trabajadores a nivel nacional para poner en marcha «medidas paliativas». Según Airbus, en España esta reunión se celebrará el próximo día 15 de marzo.

El grupo también detalló cómo queda el calendario de producción del A400M, que se ralentiza para alargar la vida del programa y tratar de ganar tiempo para que lleguen nuevos pedidos que insuflen oxígeno a los centros productivos. Así, la fabricación del A400M se ajustará a ocho unidades al año a partir de 2020 tras producir quince aviones este año y cerrar 2019 con once unidades. Esta reorganización se produce a raíz de las conversaciones mantenidas con las naciones lanzadoras del A400M, recordó la compañía, que continúa trabajando para que se materialicen diversas «oportunidades de exportación» que permitirían incrementar esta cadencia de producción.

El nuevo plan de fabricación implica en el ámbito comercial reducir la producción de A380 a seis aviones al año a partir de 2020, lo que prolongaría diez años la vida de este programa.

Juan Antonio Vázquez, representante de UGT en Airbus, mostró ayer su «rotundo rechazo» al ajuste de plantilla propuesta por la compañía. El sindicalista informó a esta redacción de que hoy habrá una reunión en Madrid en la que la empresa detallará cómo afecta el recorte de empleo a cada uno de los centros y en la que UGT solicitará datos como el número de eventuales que actualmente tiene Airbus. En su opinión, el ajuste afectará «básicamente a los dos centros de Sevilla» y supone un «retroceso para la compañía en España y para el sector andaluz». «No hay un planteamiento desde el punto de vista industrial que lo justifique. Aseguran que es por la bajada del A400M, pero la multinacional incrementó el pasado año la cartera de pedidos y obtuvo más beneficios, mientras que el mercado en sí crece un cuatro por ciento», argumenta Vázquez para apostillar que piden carga de trabajo para Sevilla para mantener el liderazgo de los centros españoles.