Almería concentra ya el 70% de la exportación de pimientos del país

Las ventas internacionales superaron los 648 millones de euros en 2016. La superficie cultivada en la provincia aumentó un 53 por ciento en ocho años

27 nov 2017 / 00:29 h - Actualizado: 27 nov 2017 / 00:29 h.
"Economía","El campo y su agroindustria"
  • Un invernadero de pimientos en El Ejido (Almería), a pleno rendimiento. / Efe
    Un invernadero de pimientos en El Ejido (Almería), a pleno rendimiento. / Efe

Almería se ha ganado a pulso eso de ser la provincia del pimiento. Y lo ha hecho gracias a una apuesta estratégica de este producto, que le ha permitido acaparar el 70 por ciento de toda la comercialización exterior de pimientos procedentes de España durante un año, 2016, en el que las exportaciones de este alimento superaron los 648 millones de euros.

El consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Rodrigo Sánchez Haro, puso en valor estos datos y el peso de Almería en las ventas internacionales en la segunda edición de las jornadas centradas en el pimiento temprano que han organizado Radio Luz y el Ayuntamiento de Dalías en este municipio almeriense del 22 al 24 de noviembre. «Una excelente iniciativa para conocer de primera mano los avances en este cultivo en auge y en el que Almería destaca en los mercados», resaltó Sánchez Haro, que resaltó el crecimiento de la superficie dedicada al pimiento en la provincia, que se ha elevado de 7.000 hasta 10.700 hectáreas en ocho años, lo que supone un importante incremento del 53 por ciento.

El titular de Agricultura explicó que el interés por el pimiento viene acompañado de unas mejores cotizaciones «pero tenemos que seguir esforzándonos para que la mayor producción obtenga también mayor valor». Al respecto, resaltó el alto valor y la calidad del pimiento temprano, «muy apreciado en los mercados europeos» pero cuya producción requiere «mucho esfuerzo» tanto por los agricultores como de las empresas de semillas y los centros de investigación, «que desarrollan variedades más adaptadas a las demandas de los consumidores».

Una de las consecuencias de esta adaptación a las nuevas tendencias del mercado, según la administración autonómica, es la apuesta de los agricultores por técnicas sostenibles, algo que se plasma, por ejemplo, en la implantación del control biológico de plagas en casi toda la superficie dedicada al cultivo de pimiento en Almería. Además, en los últimos años también ha crecido la extensión de pimiento ecológico en la provincia, donde actualmente más de un centenar de explotaciones suman 53 hectáreas frente a las 29 hectáreas de 44 fincas existentes hace un lustro (2012).

Almería obtuvo en la pasada campaña casi 700.000 toneladas de pimientos valoradas en cerca de 720 millones de euros, por lo que el este alimento concentró el 23 por ciento del total de producción hortícola provincial.

Rodrigo Sánchez ha recalcado que el impulso que está experimentando este cultivo está siendo posible «gracias al dinamismo y la capacidad de adaptación de los agricultores almerienses».

En esa línea, la Junta establece unos incentivos para la modernización de las explotaciones (129 millones de euros) e industrias (115 millones), así como las subvenciones que gestiona destinadas a la producción ecológica (241 millones). Además, también se ha referido a la ayuda agroambiental especialmente diseñada para invernaderos, con una dotación de once millones en 2017 a los que se sumarán otros ocho millones el próximo año; y al apoyo del Gobierno andaluz a la innovación y la transferencia de conocimiento a través del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera de Andalucía (Ifapa) y de las ayudas a los Grupos Operativos de Innovación.

En su intervención, Sánchez Haro ha solicitado la colaboración «de todos, tanto sector público como privado», para desarrollar nuevas variedades que respondan a los gustos de los consumidores actuales y «que se diferencien por su sabor, tamaño y duración después de la cosecha». El titular de Agricultura ha apostado además por buscar formatos diferentes a los tradicionales y «aprovechar las nuevas tecnologías para conocer mejor nuestras producciones y también a los clientes».