COAG tasa en millonarias las pérdidas por las fuertes lluvias

Los más afectados: el tomate y el algodón del Bajo Guadalquivir

27 may 2016 / 22:16 h - Actualizado: 28 may 2016 / 13:36 h.
"Agricultura","Agroalimentación","Catástrofes naturales","Regadío","Cambio climático","Coag"
  • Recolección de algodón en la comarca del Bajo Guadalquivir. / D. Estrada
    Recolección de algodón en la comarca del Bajo Guadalquivir. / D. Estrada

La organización agraria COAG Sevilla alertó ayer de que las lluvias torrenciales de principios de mayo han provocado cuantiosos daños por pudrición y asfixia radicular en los cultivos de tomate de industria, algodón, remolacha, zanahoria y hortícolas del Bajo Guadalquivir. Después de las fuertes lluvias, las altas temperaturas de la última semana, llegando a máximas de entre 28 y 30 grados, «no han hecho sino empeorar la situación, ya que la humedad existente ha propiciado la aparición de distintas enfermedades y hongos en los cultivos, lo que conllevará que los agricultores tengan que aplicar tratamientos fungicidas, incrementando así los gastos de la explotación», apunta COAG. Otros, debido a los daños, han tenido que levantar los cultivos y la gran mayoría «ha tenido que efectuar hasta una tercera resiembra».

Por producciones, COAG calcula que las pérdidas en tomate pueden llegar a los 15 millones de euros, ya que se podría haber perdido la mitad de la producción, «y esto sólo en las 3.300 hectáreas de la zona de Lebrija», apunta la organización.

En cuanto al algodón, COAG destaca «las resiembras casi generales en todas las zonas de cultivo, ya que estas lluvias han llegado con la planta recién nacida, que no ha soportado tantos días seguidos de lluvia». El agua en exceso y el posterior calor han provocado la pudrición de la semilla ya germinada y la asfixia radicular. El sobrecoste que tiene esta resiembra en el algodón supone 180 euros por hectárea entre labores y semillas, siendo la superficie estimada afectada en el Bajo Guadalquivir de unas 5.000 hectáreas sólo en los términos municipales de Utrera, Los Palacios, Las Cabezas y Lebrija. Pese a que la fecha límite de siembra de este cultivo es el 15 de mayo, la Consejería de Agricultura ha concedido una prórroga de un mes y se podrá sembrar hasta el 15 de junio.

Igualmente graves han sido las pérdidas sufridas por la zanahoria, ya que cuando aparecieron las lluvias este cultivo estaba en plena campaña de recolección y por causa del agua no ha podido recolectarse a tiempo. «Cuando se ha podido hacer, no ha salido con la calidad que el mercado requiere», apunta COAG. Además, muchos productores han tenido que arar la zanahoria por su escaso valor comercial, como consecuencia de la humedad y del encharcamiento de la tierra. Desde COAG calculan que se ha perdido un 50 por ciento de la zanahoria que quedaba en pie.

En consideración a estas pérdidas, COAG solicitará medidas que palien los efectos sufridos por los agricultores del Bajo Guadalquivir. Entre sus propuestas está la rebaja de módulos fiscales, la condonación del IBI rústico, el adelanto de la PAC, la reducción de cuotas a la Seguridad Social o una moratoria de un año en el pago de las cuotas de modernización de regadíos, entre otras