El verdeo arranca con una cosecha más corta pero con buenos precios

Con septiembre llega la recogida de la aceituna de mesa, una de las campañas más importantes para el campo sevillano, para la que se estima un aforo de 500.000 toneladas y se mira al cielo

h - Actualizado: 24 ago 2016 / 21:52 h.
"Agricultura","Verdeo","Aceituna de mesa"
  • Varios jornaleros trabajan en la recogida de aceituna en una finca de Aznalcázar. / Javier Cuesta
    Varios jornaleros trabajan en la recogida de aceituna en una finca de Aznalcázar. / Javier Cuesta

Con el comienzo del mes de septiembre arranca una de las campañas agrícolas más relevantes para la provincia de Sevilla, el verdeo, que este año se presenta con una estimación de cosecha inferior a la del año pasado y que mira al cielo para que deje precipitaciones antes del próximo 15 de septiembre. De si hay lluvia o no dependerá no solo si mengua la producción, sino también el volumen de jornales que la recogida de la aceituna de mesa deja en la provincia sevillana, que de media se sitúa en torno a los 1,5 millones.

La organización agraria COAG Andalucía estima que la cosecha será este año más corta, rondando las 500.000 toneladas a nivel nacional –el 80 por ciento de la producción se concentra en Sevilla–, después de que el año pasado se registrase un récord al alcanzar las 600.000 toneladas. Sin embargo, «si no llueve en las próximas semanas, el aforo se reducirá a la mitad». Antonio Rodríguez, responsable de aceituna de mesa de COAG, recuerda que el déficit de lluvia desde que comenzó el año agrario es del 25 por ciento de media en la provincia, lo que ha provocado que el fruto se esté agostando (arrugando). «A los olivos les está pasando lo mismo que al girasol en la Campiña, que la falta de humedad de la planta ha acabado mermando la producción a la mitad».

A expensas de lo que la climatología decida, la parte buena de esta campaña llega de la mano de los precios. Después de que el año pasado estos se anotaran un significativo repunte del 30 por ciento en la variedad manzanilla, en torno a los 72 y 75 céntimos de euro el kilo, este año se confía «en llegar a cubrir los costes de producción» y alcanzar los 90 céntimos, unos precios que no se recuerdan en las últimas décadas. «En los años 80 se pagaba a 125 pesetas», precisa Rodríguez.

¿A qué se debe este buen comportamiento? Básicamente a que toda la manzanilla está vendida y el stock de fruto es «mínimo». En este punto, desde la organización agraria se pone el acento en vigilar la entrada de aceituna similar de importación procedente de Egipto «y de dudosa trazabilidad que confunde al consumidor y hunde el precio».

En el caso de la variedad gordal, que es la que habitualmente presenta mejor cotización, la previsión es que los buenos precios se mantengan en torno al euro o 1,20 euros por kilo. Según COAG, este año se ha vendido un 52 por ciento más que el año pasado, en base a los datos de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA), de manera que el producto que queda en almacén se corresponde con tamaños no comerciales que la industria destina para pizzas y rodajas.

Por su parte, la hojiblanca mantendrá niveles parecidos a los del año pasado aunque se espera una buena cosecha. Sin embargo, destaca COAG, el buen precio en su derivación a molino, de unos 3.000 euros la tonelada, puede hacer que muchos agricultores se decanten por esta opción. Más, teniendo en cuenta que los precios del aceite son mejores incluso que los del año pasado y que se espera que finalmente la producción de oro verde no cumpla las expectativas y no llegue a los 1,5 millones de toneladas. Además, la existencia de un importante stock de esta variedad puede balancear finalmente la decisión hacia el molino.

El pistoletazo de salida del verdeo se dará en torno al 10 de septiembre, cuando se inicie la recogida de la aceituna gordal, a la que seguirá un par de semanas más tarde la manzanilla y ya, a partir de octubre, la hojiblanca. Este año, la vecería (agotamiento del árbol tras una cosecha intensa) beneficiará a la zona del Aljarafe, que el año pasado dio menos aceituna, mientras que en la zona de Arahal y Morón ocurrirá a la inversa.