«El consumo de producto natural no es una moda»

De negocio familiar a ser una de las empresas de referencia nacional en el sector de la dietética y la cosmética natural, así se resume la trayectoria de esta empresa familiar. Trabaja en 27 países y está a punto de conquistar el reino del sector, Estados Unidos

07 may 2017 / 08:48 h - Actualizado: 08 may 2017 / 14:22 h.
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  • Javier Luque, en las ‘bambalinas’ de la nueva sede de Nueva Dietética, en Alcalá de Guadaíra. / Jesús Barrera
    Javier Luque, en las ‘bambalinas’ de la nueva sede de Nueva Dietética, en Alcalá de Guadaíra. / Jesús Barrera

—¿Cómo nació el grupo Nueva Dietética?

—Mi madre estudió medicina natural y montó una herboristería, y nos convenció a toda la familia de que era un buen camino. Así que en 2003, mi padre, mi hermano y yo decidimos emprender una nueva aventura en el sector de salud y belleza con la distribución de complementos alimenticios y de cosmética natural. Empezamos como distribuidores y poco a poco crecimos en el mercado, así que optamos por lanzar una marca propia, Prisma Natural. Al principio nos la fabricaban laboratorios externos.

—¿Y cuándo deciden asumir la fabricación del producto?

—Diez años después, debido a la elevada demanda que teníamos de nuestros productos y de la gran dependencia que teníamos de los proveedores, vimos que nos compensaba económicamente fabricar nosotros mismos los productos por tiempo. Así que creamos Best Medical Diet, un laboratorio que fabrica a terceros, y cuyo mejor cliente es Nueva Dietética.

—¿Cómo ha evolucionado su catálogo?

—Empezamos con productos para el control de peso, por ser uno de los puntos clave de este sector, y también con complementos alimenticios. Luego fuimos abriendo la gama hasta tener, en el día de hoy, 350 referencias bajo la marca de Prisma Natural. Hoy fabricamos desde productos de fitoterapia, nutrición deportiva, cosmética natural... La realidad es que es un sector que está en continuo crecimiento porque cada día se descubren nuevos beneficios de las plantas.

—Entonces está claro que para su empresa la inversión en innovación es un pilar fundamental.

—Dedicamos un 10 por ciento de la facturación al I+D. Tenemos un equipo que lo conforman biólogos, farmacéuticos, químicos... Es un personal muy cualificado para la búsqueda de nuevas propiedades de las plantas y darle solución a los problemas que están en el mercado. Nuestra máxima evolución en el desarrollo viene con la gama de productos proteinados. Hemos desarrollado productos listos para comer con un alto porcentaje en proteínas, y bajo en hidratos y en grasas.

—¿Qué tipos de productos?

—Hablamos de que puedas comerte un pan con un índice muy bajo en hidratos, un botellín de cerveza, un chorizo o un batido de chocolate, productos que a priori no los comerías porque van a engordar.

—Además del laboratorio y la distribución, ¿qué otras líneas estratégicas tiene el grupo?

—En noviembre lanzamos la franquicia de tiendas Global Diet, que nacen con el objeto de vender producto natural y la gama de dieta proteinada. Además están homologados como centros médicos, ya que tienen una unidad de nutrición, que te permite hacer un seguimiento de control de peso. Empezamos convirtiendo las tiendas de mi madre, por lo que cuenta con la experiencia de más de 30 años en el sector, y desde que empezamos en noviembre ya tenemos más de diez franquicias en Sevilla, Alicante, Madrid y próximamente en Jerez.

—¿Cuántos trabajadores tiene el grupo?

—Somos más de 90 entre Nueva Dietética y Best Medical Diet. Más el resto de trabajadores de las franquicias.

—Trabajan en todo el territorio nacional, ¿han salido ya al exterior?

—Estamos presentes en 27 países. Desde Portugal, Inglaterra, Francia, Alemania, también tenemos mucha presencia en Bulgaria y Rumania. Además, en noviembre abrimos una sede en Estados Unidos, como Nueva Dietética USA. En unos días saldrán los primeros containers con productos. Hace poco hemos cerrado un acuerdo de distribución en Brasil, Chile y Colombia. También estamos pendientes de vender en China, que junto a Estados Unidos, es uno de nuestros mercados estratégicos.

—Pero China es la cuna de la medicina natural, ¿por qué introducirse en un mercado como el asiático?

—China tiende a buscar este tipo de productos en Europa por motivos de calidad, ya que aquí las exigencias sanitarias son muy altas. Paralelamente, las políticas de Donald Trump han provocado que se cierren puertas a laboratorios americanos y son huecos que se van a quedar libres. Las principales empresas de dietética están en Estados Unidos y estaban muy bien posicionadas en China, pero les han dado seis meses para irse. No obstante, entrar en este tipo de mercado es muy complejo por los registros de marca y los sanitarios; hay que cumplir toda la normativa para que el producto no se quede en la aduana. No es fácil, pero es un mercado importante.

—¿Impera la moda en el consumo de producto natural?

—Cuando es una moda hay picos altos y caídas rápidas, pero este mercado está en evolución desde hace más de 15 años. El crecimiento no sólo es continuo, sino que es exponencial. A mayor medida de conocimiento, más crece el consumo de estos productos. Antes, cuando comprábamos un brick de leche era de una marca u otra, hoy viene con vitamina A, probióticos, omega 3... No es una moda, lo tenemos contrastado. Si un producto lleva 20 años en continuo crecimiento y es sostenible, no es una moda, es más, pienso que el gran crecimiento está por llegar en los próximos cinco años.

—¿Cómo espera cerrar el año?

—Este año ya hemos superado un 25 por ciento los números de 2016. Posiblemente lleguemos a cerrar el año con un repunte del 50 por ciento.