Sáenz de Santamaría pide diálogo para mantener la estabilidad

Nueva etapa. La vicepresidenta anuncia reuniones con agentes sociales y comunidades para ser ejemplo de serenidad «en los tiempos que corren»

12 nov 2016 / 18:31 h - Actualizado: 13 nov 2016 / 14:19 h.
"Economía","Ganar el futuro desde Sevilla"
  • Soraya Sáenz de Santamaría, vicepresidenta del Gobierno, entregó sendas placas a los responsables de Caja Rural del Sur y Mayoral. / El Correo
    Soraya Sáenz de Santamaría, vicepresidenta del Gobierno, entregó sendas placas a los responsables de Caja Rural del Sur y Mayoral. / El Correo

Soraya Sáenz de Santamaría llegó al auditorio de Fibes el pasado viernes para anunciar que el Gobierno retoma el diálogo social y convoca a empresarios y sindicatos, para reclamar diálogo «sincero» a los presidentes autonómicos –incluida la socialista Susana Díaz– y para trazar los grandes retos del nuevo Ejecutivo de Rajoy. Y se llevó la mayor ovación de la VI Asamblea de la Agrupación de Miembros del Instituto Internacional San Telmo. «En los tiempos que corren», dijo, España tiene que seguir siendo «ejemplo de serenidad, sensatez y estabilidad».

Sin precisar fecha, la vicepresidenta y ministra de la Presidencia y para las Administraciones Territoriales reclamó «diálogo sincero» entre los presidentes autonómicos en la futura Conferencia de Presidentes que va convocar «en breve» Mariano Rajoy. El objetivo: abrir «un diálogo muy amplio» sobre los grandes temas que afectan a este país.

¿Y cuáles son? Tras la incertidumbre de los diez últimos meses, ha llegado el momento de «poner encima de la mesa de la agenda política los grandes retos, como el envejecimiento de la población, la situación de los jóvenes, la implementación de la agenda digital y la necesidad de dar una proyección de futuro a elementos vitales como las pensiones y el mantenimiento del estado del bienestar». Así, «revitalizar al pacto de Toledo» estará en la nueva agenda del Gobierno. En 2011 se pagaban 70.000 millones de euros en prestaciones públicas y en 2015, 117.000 millones. Ahí está el problema.

«Tenemos que ser capaces de dialogar y de ponernos de acuerdo y de estar a la altura de las circunstancias, siendo exigentes en la crítica y constructivos en los argumentos y aportaciones», advirtió la ministra con más poder en el Gobierno.

Y para ello no sólo pidió diálogo a las comunidades, sino también a los agentes sociales. Sáenz de Santamaría anunció que el Gobierno ya ha convocado a UGT y CCOO y a las patronales CEOE y Cepyme para abordar medidas que logren que la recuperación alcance a todos, «como a la población más joven», y para reflexionar sobre «cómo lograr la sostenibilidad de las pensiones» y el mantenimiento del estado del bienestar.

Tras pedir lealtad institucional, dado que el Gobierno «tiene en el Parlamento el número de apoyos que tiene», defendió que «todos somos Estado, todas las administraciones, todos los poderes y también ese conjunto de la sociedad civil que son los empresarios».

Precisamente ante un nutrido número de empresarios y ejecutivos, Sáenz de Santamaría aseguró que España ha ganado «confianza y competitividad a pulso, gracias también a que los españoles han sabido demostrar la fortaleza de un país en tiempos de crisis».

En clave económica, defendió que España ha pasado de estar en situación de «riesgo» a ser «una promesa». La vicepresidenta afirmó que España cumplirá el déficit del 4,6 por ciento en 2016, que cerrará el año con un crecimiento superior al tres por ciento, y que tras las reformas realizadas desde 2011 España está «a la cabeza del crecimiento y de creación de empleo en la UE porque logramos recuperar a pulso y con muchas reformas la confianza». El reto, reiteró en varias ocasiones, es que existan 20 millones de puestos de trabajo en 2020.