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Dos mujeres, ante un escaparate que anuncia rebajas. / Manuel Gómez
UGT y CCOO han convocado hoy una concentración en la calle Puente y Pellón, a las puertas de Almacenes Arias –propiedad de Enrique Arias, expresidente de la Federación de Comercio y Servicios del Centro de Sevilla (Alcentro)–, para exigir el desbloqueo del nuevo convenio colectivo del sector del comercio. Un conflicto laboral que desembocará en una huelga los días 29 y 30 de junio y 2 de julio, en el inicio de las rebajas, si ambas partes no llegan a un acuerdo.
Para ello tendrán dos oportunidades. Según explicó a este periódico Enrique Jiménez, secretario de Acción Sindical FeSMC-UGT Sevilla, el próximo lunes 25 han sido convocados en la Delegación provincial de Empleo para intentar acercar posturas y posibilitar que en la reunión prevista para este martes 26 en el Sercla (Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales) se desbloquee el convenio colectivo que afecta a 30.000 trabajadores (empleados del comercio textil, joyería, piel, bazares, souvenirs o, por ejemplo, establecimientos de muebles) en Sevilla.
No obstante, Jiménez añadió que ve «complicado» que haya un acuerdo porque hay dos puntos en los que no hay acercamiento.
Fuentes de la Confederación Provincial de Comercio y Servicios de Sevilla (Aprocom) aseguraron a esta redacción que el plus como compensación a los beneficios de las grandes cadenas de 90 euros al mes para los trabajadores de empresas de más de 250 empleados, incluido en el preacuerdo firmado a finales de 2017 en el Sercla (que evitó la huelga en Navidades), «tiene que ser proporcional al tiempo trabajado». En cambio, UGT y CCOO insisten en que es un punto ya pactado y firmado en el Sercla «para que a las grandes compañías como Inditex, Mango o El Corte Inglés les salga caro hacer contratos de 8 o 16 horas al mes», denuncia Pepa Cuaresma, secretaria general del Sindicato Provincial de Servicios de CCOO Sevilla.
El segundo punto en discordia es el artículo 7 de pluses de «compensación y absorción», «que debe hacer que la subida salarial pactada sea real», según Jiménez.
UGT y CCOO se reunieron ayer con Facua, organización de consumidores que les mostró su apoyo en este conflicto.