–¿Cómo nació Artealca?
—Los orígenes de la empresa se remontan a tres generaciones. Mis abuelos, tanto maternos como paternos, ya cultivaban alcachofa. Mi abuelo paterno estuvo exiliado en Francia y allí trabajó como peón en una explotación de alcachofas y cuando volvió a Cantilla siguió con el cultivo. Luego mi padre heredó el cultivo e incorporó la producción de maíz dulce hace 20 años. En 2012, mi hermano Alejandro y yo decidimos profesionalizar la producción y creamos Artealca.
—Pero la alcachofa no era un cultivo tradicional en la provincia...
—No era un cultivo tradicional ni importante, pero sí era rentable. En torno a los años 80, en el pueblo llegó a haber dos conserveras grandes, pero cerraron. Al final se abandonó la producción a favor de otros cultivos como la naranja. La alcachofa es bastante delicada. Es una flor y hay que ir cortándola mientras va creciendo, tienes que estar constantemente repasando y revisando cada planta. Además es muy delicada en la postcosecha, hay que cortarla en el momento óptimo y refrigerarla corriendo.
—¿Cuál es su producción anual?
—Contamos con en torno a 100 hectáreas de alcachofa, de la que anualmente producimos unos 2 millones de kilos. De maíz dulce tenemos unas 150 hectáreas de las que salen en torno a 3,5 millones de kilos al año.
—Hace cuatro años invirtieron en una planta propia de transformación. ¿Qué motivó esta decisión?
—Cuando se mueven tanto volumen de producto hay algunos que por pequeños defecto no pueden salir en fresco al consumidor, la mejor salida es transformarlos. Nos permite tener el cultivo cerrado: cultivamos, transformamos y vendemos. Por eso hace cuatro año decidimos montar una línea de conservas vegetales donde envasamos alcachofa en aceite de oliva. Tener tu propia línea de transformación te permite llegar a otro tipo de clientes. Además, este año hemos incorporaado un línea para envasar maíz cocido. Desde su puesta en marcha hemos podido invertir cerca de 400.000 euros.
—Desde hace dos años son proveedores de Mercadona de alcachofa. ¿Qué beneficios les ha reportado?
—Comenzamos a trabajar con Mercadona por casualidad. Un vecino del pueblo, que trabajaba en la cadena, conocía nuestro producto y nos puso en contacto con el departamento de compras. Buscaban un producto de calidad y sobre todo de cercanía. Empezamos con algunas pruebas y fueron satisfactorias para los dos. El primer año fue bastante bien y el segundo casi triplicamos el volumen de alcachofa. Trabajar con Mercadona te asegura un volumen y el pago. Es una relación de tú a tú; es una sociedad entre dos empresas que tratan de llevar el mejor servicio posible y el mejor producto, al final eso repercute en el consumidor, que gana en frescura y en calidad. Además, al ser uno de los principales productores de maíz dulce fresco, una cosa llevó a la otra y desde hace un año también la suministramos maíz. En torno al 70 por ciento de nuestra producción de alcachofa fresca se destina a Mercadona en alcachofa, en máiz ronda el 15 por ciento.
—¿Qué otros clientes rezan en su cartera?
—Trabajamos también con el grupo Hermanos Martín –Supermercados MAS–, además de venderle a mayoristas como Mercasevilla, Mercabarna o Mercamadrid.
—¿Venden al exterior?
—El maíz dulce está enfocado principalmente a la exportacion. En torno al 85 por ciento se vende a mercados extranjeros, principalmente a Alemania, Inglaterra, Francia y países nórdicos. El resto se vende a nivel nacional, principalmente a Mercadona. En el caso de las alcachofas, se exportan a Francia. El problema de este producto es la postcosecha: desde que se arranca hasta que se compra la alcachofa tiende a pardearse, sufre cambios de sabor y textura, por lo que sólo se venden variedades exclusivas para la exportación.
—¿Cuántas personas trabajan en la compañía?
—En plantilla somos unas 12 personas, pero en los picos de campaña podemos llegar a 80 empleados. En la conservera Fijos en la empresa somos unas 12 o 13 personas y en picos de temoralidad de 80 persona.
—¿Qué previsiones de crecimiento tienen para este año?
—Este año la facturación aumentará en torno a un 30 por ciento y el año que viene esperamos que con la puesta en marcha de la nueva línea de maíz cocido el repunte esté entre el 25 y el 30 por ciento.