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Un grupo de escolares pasea entre la maquinaria expuesta en el recinto ferial. / El Correo -
Recolectoras automáticas de aceituna con paraguas para la recogida. / El Correo
El recinto ferial de Carmona ha cambiado estos días los farolillos y los trajes de flamenca por un pasacalles de tractores y todo tipo de maquinaria agrícola, entremezclado con productos locales, expositores de empresas abiertos a profesionales y curiosos, muestras de ganado y hasta actividades para los más pequeños, que inundan las calles en filas de dos. Sorprende, paseando por el Real, la incesante cascada de niños deseosos de retratarse ante las ruedas gigantes de los tractores. Todos los colegios de Carmona llevan a sus alumnos de Primaria a conocer de cerca la feria Agroporc. «¿Sabéis para qué sirve eso», pregunta un profesor a su clase. «Para hacer agujeros en la tierra», responde a gritos uno de ellos. «Bueno, para arar la tierra». Lo tienen claro. El premio de la visita es ver de cerca a los cerdos, aves, caballos, gallos y cabras que se exhiben en la muestra.
Tras la parada obligatoria para hacer la foto para el recuerdo, se acercan dos visitantes que vienen buscando un compresor para pintura. Otros tres se han detenido junto a una abonadora y preguntan todos los detalles técnicos. Sus preguntas se confunden con el hilo musical, donde suena una guitarra flamenca de fondo. Mientras, un vecino de Herrera camina entre tractores. Necesita uno para su finca.
Si algo caracteriza a la Feria Agrícola y Ganadera de Carmona, que se desarrolla hasta este domingo, es precisamente esa mezcla de profesional del campo que va con las ideas claras buscando un tractor o una abonadora para su explotación, con el matrimonio vecino del barrio de Los Jinetes que ha visto un anuncio en la televisión y se ha animado a acercarse. «A mí me interesa la escuela de hostelería» –dice él–; «yo vengo por los animales», reconoce ella.
Entre los primeros paseantes de la mañana, José, un vecino de la localidad que en breve cumplirá 86 años. Ha pasado toda la vida trabajando en el campo y ahora observa con cara de asombro cómo y cuánto han cambiado las herramientas de trabajo. «Son modernísimas y muy grandes. No tienen nada que ver con las que usábamos nosotros», rememora. «Hoy puedes ir en un tractor con aire acondicionado y echas una peonada y no te das ni cuenta. Yo me acuerdo de ir en la cosechadora tragando polvo, que se subía todo para arriba».
En efecto, la película ha cambiado y de qué manera. En el expositor de Pérez González, empresa de La Puebla de Cazalla, su propietario Manuel muestra lo último en tecnología. Entre sus estrellas, destaca una cosechadora que ha sido adquirida por un empresario malagueño y que se estrenará este año en Isla Mayor en la cosecha del arroz. La inversión, más de 400.000 euros.
Junto a esta imponente herramienta, destacan también las máquinas recolectoras de aceituna. «¿Pero la recogida mecanizada no tiene aún poco predicamento? ¿No daña el fruto?». La respuesta es rotunda. «Eso es por la mala utilización y la mala calidad de la máquina», espeta. «El sistema de paraguas es lo que más abarata la recolección de aceituna», al ofrecer un rendimiento de 30.000 kilos en una jornada y permitir una carga de unos 500 kilos. El precio se sitúa entre los 30.000 y 34.000 euros.
¿Son útiles este tipo de ferias? Manuel ha participado en sus ocho ediciones. «Hay que estar, aunque se sabe cuándo se empieza un negocio, pero no cuándo se cierra», precisa.
También es de los asiduos la empresa de maquinaria Seagro Center, que tiene sede en Marchena para vender fitosanitarios y en La Luisiana el centro de operaciones de la maquinaria.
Todo Campo del Sur, por su parte, es una firma carmonense que estuvo el primer año de la feria y ha regresado éste porque «creemos que va a tener más afluencia de público», explica José María Sánchez, junto a su socio indio, cuyos productos distribuye «con éxito» desde hace varios años. Su oferta va desde herramientas de jardinería, hasta podadoras de olivo e incluso semillas.
La vida bulle en las distintas carpas y espacios, complementada con jornadas técnicas sobre cultivos, homenajes como a Puerto de Indias y visitas, entre ellas, la del presidente del PP andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla.