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Luis Oliver busca la forma de estar presente en la junta del día 23 / Javier Cuesta
Los movimientos de cara a la junta de accionistas del 23 de septiembre se suceden a un ritmo acorde con la trascendencia de la cita, que es fundamental para el futuro del Real Betis Balompié. Aparte de las maniobras para comprar y vender acciones y acumular poder con el fin de ganar la asamblea, todavía está por ver si uno de los actores con papel protagonista antes de la intervención judicial acudirá al hotel Al-Andalus. Se trata de Bitton Sport, que se mantiene en sus trece de que Farusa le vendió el 51,34% del capital social del club.
Luis Oliver, que continúa siendo el máximo responsable de Bitton, se presentó este viernes por la mañana en el estadio Benito Villamarín con la intención de acreditarse para la junta de accionistas. Se basaba en que las acciones que no han sido suspendidas por el Juzgado de lo Mercantil, algo más del 19% del total, están a nombre de la sociedad a la que representa, igual que el 31,38% anulado temporalmente por el juez Eduardo Gómez.
El Betis se negó a acreditarlo porque considera que todas esas acciones, según el libro de accionistas, son de Farusa. Ni Oliver ni su abogado convencieron a los responsables verdiblancos, pero lo volverán a intentar.
A todo esto, Bitton Sport tiene muy claro a quién apoyaría si tuviese que elegir el 23-S: Manuel Castaño. «Nosotros vemos en Castaño un buen amigo. Es un buen hombre, un buen gestor y un amante de la cantera. Creemos que la vuelta de gente como Valenzuela es imprescindible.La vuelta de Castaño también es imprescindible, así que tiene nuestro apoyo», dijo otro de los accionistas de Bitton, el también exconsejero Joaquín Zulategui, en El Desmarque.