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El pívot nigeriano de Real Betis Energía Plus Anosike Oderah intenta tirar a canasta ante los jugadores del UCAM Murcia, Ovie Soko, Sadiel Rojas y Brad Oleson. / Marcial Guilén (Efe)
El Real Betis Energía Plus ha logrado convertir su primera victoria ante Obradoiro en dinámica ganadora con la conseguida en la pista del UCAM Murcia. Dos buenos partidos ante dos de los equipos más sólidos de la competición, y especialmente en el de hoy, demostrando que aún tiene mucho margen de mejora, puesto que fue un duelo lleno de altibajos donde lo más positivo fue su capacidad para reaccionar en el peor momento (44-31), cuando aparecieron sus líderes, Schilb y Kelly, para volcar la situación y lograr un impulso decisivo en la progresión que debe llevarle a lograr la permanencia.
El Betis arrancó el partido con la confianza de esa primera victoria ante Obradoiro, con fe en su defensa y un plan para neutralizar los argumentos conocidos de UCAM Murcia, en el tiro de tres y el rebote ofensivo. Ambos equipos se mostraron bastante desacertados en los tiros en el primer round, superando apenas el 30% de acierto. La actuación de Anosike representaba bien lo que ocurría: 2 de 7 en lanzamientos y siete rebotes. El dominio local cambió con los dos triples casi consecutivos de Alfonso Sánchez, que respondían a los dos que lograba también el base de Murcia, Hannah, el más iluminado sobre la pista (14-16).
El Real Betis Energía Plus mantuvo la buena dinámica cuando llegaron las rotaciones, e incluso logró ampliar su ventaja hasta una máxima de cinco puntos (19-24). Sin embargo, a partir de dos errores defensivos, que permitieron sendos dos más uno para los de Ibon Navarro, el conjunto verdiblanco empezó a hacer aguas. Su defensa se resquebrajó, cediendo varias segundas opciones por la debilidad del rebote defensivo y Murcia empezó a anotar con cierta facilidad, lo que no había logrado hasta entonces. Esos problemas defensivos se trasladaron, como suele ocurrir, al ataque, que entró en caos.
Una técnica a Quintana culminó la caída libre del Betis, en una jugada en la que encajó cinco puntos para un parcial de 9-0 (37-28). Tres tiros libres de Kelly, tras falta en un lanzamiento de tres, paliaron un poco la situación para llegar al descanso un poco menos tocado (39-31).
Y apareció Blake Schilb. Desaparecido por completo el líder de la victoria ante Obradoiro, el estadounidense con pasaporte checo agarró el partido y lo puso a sus pies durante diez minutos fantásticos. Con trece puntos, ayudando en el rebote, colocando incluso un tapón, lideró la remontada verdiblanca, que con un triple de Uriz logró su máxima ventaja en el inicio del último cuarto (50-57).
Pero como sucedió con el 19-24, el Betis volvió a gestionar mal su juego en situación de dominio del marcador. Llevado por la ansiedad, hiló varios pésimos ataques y Murcia volvió a equilibrar el tanteo (57-57). El partido iba a caer para el equipo que tuviese más pausa y las ideas más claras, porque intercambiaban malas decisiones. Y fue el equipo de Quintana quien empezó a hacer mejor las cosas. Acertó McGrath con un triple, mejoró la defensa y UCAM Murcia empezó a jugar a la ruleta del triple como única solución. Cometió Delía una falta en ataque y Kelly anotó un canastón (60-68). Restaban 2:30. Murcia no aprovechó la pérdida número 19 del Betis y Kelly volvió a sumar otra canasta con su enorme talento. El equipo local dejó ya de creer y el Betis Energía Plus sumó su segunda victoria consecutiva, segunda de la temporada y empieza a levantar la cabeza para poder buscar la permanencia.
FICHA TÉCNICA:
63. UCAM MURCIA (14+25+11+13): Hannah (17), Oleson (4), Rojas (4), Soko (6), Delía (7) -cinco inicial-, Urtasun (7), Kloof (0), Tumba (2), Lukovic (7) y Benite (9).
70. REAL BETIS EP: (16+15+23+16): Draper (2), Nelson (2), Schilb (13), Kelly (21), Anosike (6) -cinco inicial-, McGrath (3), Cruz (2), Uriz (7), Golubovic (8), Sánchez (6).
Árbitros: Benjamín Jiménez, Jordi Aliaga y Andrés Fernández. Eliminaron por faltas a Soko (m.40).
Incidencias: partido de la jornada 12 de la Liga Endesa disputado en el Palacio Municipal de los Deportes de Murcia, ante 5.120 espectadores.