86-85: El Betis hace posible lo imposible

El equipo de Tabak vence al Real Madrid en un partido espléndido en el que supo sobreponerse incluso al arbitraje. Así fue la última jugada (Vídeo).

27 dic 2016 / 23:37 h - Actualizado: 28 dic 2016 / 01:09 h.
"Real Madrid","Real Betis Energía Plus","Zan Tabak"
  • Radicevic se hace con el balón frente al madridista Llull. / Efe
    Radicevic se hace con el balón frente al madridista Llull. / Efe

Había una posibilidad entre ¿mil? ¿un millón? pero el Real Betis Energía Plus se agarró a ella con una demostración de fe digna de un cuento de Navidad. Logró derribar a un súper equipo, que tantas y tantas veces se ha paseado en los últimos años en San Pablo (14 victorias seguidas), y no dio, incluso, su brazo a torcer cuando un patético arbitraje trataba también de disuadirle. Devolvió golpe a golpe, en ataque y en defensa, y logró mucho más que una victoria, una demostración de capacidad y una bombona de oxígeno para su delicada situación en la clasificación.

Y algo más. Una demostración de puro baloncesto, de lo grande que puede ser este deporte y este club, en vísperas de un votación de accionistas del club de fútbol en la que debe ser ratificada su adscripción como sección del Betis.

El Real Betis le aguantó el pulso al Real Madrid en los parámetros que gusta, es decir, devolviendo golpes en ataque. Zan Tabak debía pensar en la banda que aquello era una especie de suicidio, pese a que su intención primera, con Milosevic en el quinteto, era plantear la idea que defiende a capa y a espada, pese a que el corte de su plantilla haya dado muestras manifiestas de que aptitudes para defender a alto nivel no tiene. Como suele suceder, el duelo en el primer cuarto fue desenfadado, en un ambiente propicio, con el pabellón a reventar y mucho aficionado madridista. Ambiente festivo que se crispó justo cuando los árbitros decidieron aparcar su necesaria imparcialidad. Había un precioso duelo entre Lockett y Llull en la anotación, y un Betis con agresividad sobre todo en sus ataques, agresividad y acierto, en un Madrid que también dejaba hacer, que tenía el control aunque no mandara en el marcador, condescendiente porque se sabía muy superior. Los locales aplacaron la primera ventaja visitante (21-26) con una excelente salida en el inicio del segundo cuarto (29-28), y en ese momento, el trío Pérez Pérez, Bultó y Más practicó el peor arbitraje. Un equipo como el Madrid no necesita algo así, ni beneficia su imagen, un partido de ACB no puede emborronar un espectáculo que llena un pabellón con 7.000 personas. Decisiones erróneas y manifiestamente injustas, con criterios diferentes según protestara Nachbar (técnica) o Felipe Reyes (nada), según el contacto fuese bajo un aro o en otro. Así se perpetró un 0-11 con el acento del talento de Randolph (29-39) pero aún así, el Betis no se frenó. Mantuvo la actitud y pese a los 18 puntos del increíble Llull, al descanso siguió muy dentro del partido (41-46), con un triple sobre la bocina de Radicevic, que festejó con entusiasmo después de que en los partidos precedentes no tuviese precisamente fortuna en el tiro de distancia.

El primer triple de Stojanovski alentó un parcial de 7-0 (50-53) en una salida de vestuarios donde el partido comenzó a ser más de verdad, mejoraban las defensas, los contactos ya eran más duros, menos espacios, menos tanteo. No sacaron los verdiblancos todo el rédito a sus buenos minutos, porque cerraban bien el rebote y ponían en problemas la circulación de balón del Madrid en ataque, con Luka Doncic a los mandos. Desde el tiro libre tomaba oxígeno el Madrid, con el Betis en bonus muy pronto, pero Laso debió parar el partido porque el transatlántico no encontraba puerta de acceso a la canasta local (56-57). Al Madrid empezaba a incomodarle un partido que pensaron sencillo, con la mente puesta en otra batalla el viernes en Estambul, en la Euroliga.

Apareció Rudy Fernández con diez puntos consecutivos para abrir una brecha en el partido (60-69) al término del primer cuarto. Hasta entonces no había anotado el mallorquín.

Otra dudosa falta en ataque de Milosevic llevó a la desesperación a Tabak en el banquillo, que pedía explicaciones a los árbitros. Carrasco trataba de disuadirlo para que no recibiera, encima, técnica. Estaba claro que el Betis no sólo debía luchar contra el Madrid. Otro triple de Stojanovski (70-73) elevaba la presión y los decibelios de la grada. Lograba amplificarlo Mahalbasic poniendo en evidencia a Hunter, al que le robó la cartera (72-73). El Madrid sólo había conseguido anotar cuatro puntos en cinco minutos, y ese era el tiempo que quedaba. La hazaña era posible.

Y el Betis la acarició con un canastón de Radicevic a falta de 41 segundos (84-83). Llull falló el tiro, también Carroll, que cogió el rebote, pero no Felipe Reyes, que cogió un rebote ofensivo en el que le sacó la quinta falta a Mahalbasic (16 puntos), magnífico bajo los aros. Triguero acertó también desde el tiro libre y el Betis ganaba a falta de 15 segundos (86-85). Un ataque para el Madrid. Y una defensa para el recuerdo en San Pablo, porque el equipo verdiblanco hizo posible lo imposible.

FICHA TÉCNICA:

86 - Real Betis Energía Plus (23+18+19+26): Radicevic (15), Stojanovski (10), Lockett (16), Milosevic (5), Mahalbasic (16) -cinco inicial-, Alfonso Sánchez (7), Nachbar (11), Triguero (4), Cate (-), Marc García (-), y Chery (2).

85 - Real Madrid (28+18+23+16): Luka Doncic (6), Maciulis (2), Llull (20), Felipe Reyes (12), Ayón Gustavo (12) -cinco inicial-, Randolph (10), Dontaye Draper (-), Rudy Fernández (10), Carroll (11) y Hunter (2).

Árbitro: Pérez Pérez, Bultó y Mas. Eliminaron por cinco faltas personales al local Mahalbasic. (m.40).

Incidencias: Partido de la decimocuarta jornada de la Liga Endesa, disputado en el Palacio de los Deportes San Pablo ante algo mas de 7.000 espectadores que llenaron las gradas.