Menú

Hakanson y Nachbar, simbiosis expansiva

La progresión del CB Sevilla, con cima en Valencia, coincide con la llegada del joven base sueco, cuyo rendimiento ha superado todas las expectativas

05 abr 2016 / 11:15 h - Actualizado: 05 abr 2016 / 11:27 h.
"Baloncesto","Liga ACB","Luis Casimiro","Bostjan Nachbar","Hakanson"
  • Hakanson lanza a canasta en el partido ante Fuenlabrada.
    Hakanson lanza a canasta en el partido ante Fuenlabrada.

Ha encajado en el Baloncesto Sevilla como mano en guante de seda. Ludde Hakanson está en el epicentro del terremoto que se ha producido en el equipo de Luis Casimiro, que en las últimas nueve jornadas, desde la llegada del base sueco, recopila cinco triunfos en nueve jornadas. Más allá de ese balance de equipo de play off, destila un nivel de juego capaz de ganar a tres de los cinco mejores de la Liga Endesa, el último en la pista del segundo, Valencia Basket, donde logró el clímax de una progresión que tuvo su punto de partida en el Carpena, donde debutó el jugador de Matteus.

La dirección de juego había dado verdaderos quebraderos de cabeza al equipo sevillano ya desde la pretemporada, cuando tuvo la constatación de que no podría contar con el titular para la posición, Nikola Radicevic, por la lesión que aún le mantiene fuera de las canchas. Ni el veterano Jermaine Anderson ni el inexperto Nenad Miljenovic ofrecieron nivel de base titular de un equipo ACB. Casimiro tuvo que optar por entregar la manija a Berni Rodríguez, y por momentos también a Scott Bamforth, recursos que acabaron por trastornar roles y desencajar piezas. El presidente Fernando Moral y el propio técnico manchego apostaron en enero por Hakanson, que llegó cedido por el FC Barcelona tras rescatarlo del VEF Riga, pese a que solo contaba con 19 años. Su rendimiento, empero, ha superado con creces todas las expectativas.

Con Hakanson al mando todas las piezas volvieron a sus lugares naturales. Berni a hacer de Berni, Bamforth a hacer de Bamforth. El periodo de adaptación del sueco apenas se cobró un partido, el de Málaga, donde lo vio debutar su madre, que viajó desde Suecia para darle una sorpresa. Ya estuvo también en su presentación en las oficinas del San Pablo. El respaldo de su entorno familiar y el hecho de que hable sin problemas el castellano, tras sus años en La Masía, donde llegó siendo cadete, han sido fundamentales para que su respuesta en la cancha sea la misma de un jugador que llevara mucho más tiempo en el equipo y en el club. Con 20 años recién cumplidos, es, después de Cate, el más joven de la plantilla, lo que no es óbice para que su relación más estrecha en el vestuario sea con el segundo más veterano, Bostjan Nachbar, al que ya conocía de su corto periplo en la primera plantilla del FC Barcelona. Entonces el esloveno ya le ayudaba en su proceso de crecimiento, y ahora lo ha retomado en Sevilla, donde se da la circunstancia de que uno de los grandes beneficiados del juego del sueco ha sido Nachbar, que de tocar fondo en Málaga ha pasado a ser MVP del mes de marzo en la ACB.

Asombra su tranquilidad en la pista, donde toma casi siempre las mejores decisiones, apoyado en una capacidad física por encima de la que correspondería a un chico en su primera etapa en el baloncesto profesional. Trabaja cada día junto a Javi Carrasco y siempre está dispuesto a añadir horas extras en San Pablo, donde en los entrenamientos da muestras de su facilidad para el tiro de tres, una situación que hasta ahora, dentro de su margen de mejora, no ha llevado como debiera, por su capacidad, a los partidos.

De los nueve partidos que ha disputado, en seis ha acabado en dobles dígitos de valoración, con promedio de 10, el cuarto del equipo tras Balvin (14.8), Bamforth (13.3) y Nachbar (10.6). Además, en los últimos cinco partidos, el base titular más joven de la Liga ha logrado dobles dígitos en anotación y promedia 3 asistencias por partido.