Las tendencias y las sensaciones (0-1)

La Balompédica Lebrijana cocina un triunfo de incalculable valor ante un Castilleja preso de la ansiedad y la necesidad. Decidió un gol del inspirado Chico

11 mar 2018 / 18:33 h - Actualizado: 11 mar 2018 / 18:36 h.
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  • El meta de la Balompédica Lebrijana, Javi, detiene un lanzamiento a bocajarro del anfitrión Gerardo. / Jesús Barrera
    El meta de la Balompédica Lebrijana, Javi, detiene un lanzamiento a bocajarro del anfitrión Gerardo. / Jesús Barrera

La inspiración y la confianza son armas de destrucción masiva en la Tercera División, una categoría que encarcela al ingenio y cohíbe al talento en los momentos de presión y necesidad. La Balompédica Lebrijana, implicada en la pugna por el play off de ascenso a la Segunda División B, doblegó al Castilleja gracias a un gol de Chico y a un ejercicio de paciencia infinita. El ‘9’ es un tipo que se eleva de entre la maleza para exhibir su coraza y sus plumas de capitán general. La escuadra anfitriona fue anestesiada por la calma y el sosiego de los hombres de Joaquín Hidalgo, que cocinaron el éxito en fogones de leña de olivo. La vitrocerámica es la enemiga del cuchareo del fútbol.

De inicio, el entrenador del Castilleja, José Antonio Granja, optó por un 1-4-4-1-1 con Espada como ariete. Sin Borja, que en la segunda mitad ejerció de ancla, la responsabilidad en la medular fue para Isco Ortega y Martín. La Balona compareció con un 1-4-2-3-1, una pizarra en la que Chico asumió el papel de killer. El primer conato fue rubricado por Juande, cuyo lanzamiento ajustado escupió el muslo de Juan Carlos. Fue el primer forcejeo real en el tablero. El Casti, que triangulaba con criterio, replicó con una invasión de la zona hostil de Gerardo, anulado por Javi en el momento de la muerte súbita.

Con Raúl Cabrera en el carril siniestro, el mayor foco de peligro fue Plusco, que intercambió su posición de origen con Ranchero para generar una sensación de peligro continuo. El propio Raúl Cabrera, serio en el plano defensivo, dibujó un pase certero hacia Plusco, errático en el instante del tiro de gracia. Fue el último mensaje antes de que Vaca Núñez, que mantuvo el tipo, decretara el final de las hostilidades. El segundo acto fue un ejercicio de realidad.

La Balona, con alma de play off, amortiguó la efervescencia del Castilleja e Hidalgo, astuto, recurrió a Dani Alain, que interpretó la melodía necesaria en la cocina. El ex del Torreblanca gobernó la posesión, concedió crédito a las contras y originó la acción del 0-1. Copero, certero, botó un saque de esquina hacia el segundo palo, desde donde emergió Chico para, con un cabezazo picado, activar el electrónico. El gol generó un nuevo mapa de coordenadas. Y Granja reaccionó rápido con el ingreso de Borja, que aportó jerarquía y clarividencia, y Manu Cordero, desequilibrante.

Manu Cordero exigió una actuación de faena de trasteo impecable de Javi en una falta desde la frontal que desviaron la madera y el miedo de Joaquín Hidalgo, que respiró aliviado cuando el colegiado señaló el final. Una posta menos de un camino que para el Casti es una huida del infierno.

Ficha técnica:

Castilleja CF: Josemi, Juanma, José Carlos, Juan, Juan Carlos (Edu Brenes 79’), Isco Ortega (Borja 73’), Pipi, Martín, Espada (Manu Cordero 61’), Gerardo y Carlitos.

Balompédica Lebrijana: Javi, Ranchero, Samuel (Manu Sánchez 45’), Chico, Dani Fornell, Plusco (Sosa 84’), Gabri (Dani Alain 45’), Raúl Cabrera, Selu, Copero y Juande.

Gol: 0-1 Chico (67’).

Árbitro: Vaca Núñez (Cádiz). Expulsó al local Carlitos (78’). Amarilla a los visitantes Samuel, Dani Fornell, Plusco, Gabri, Juande y Manu Sánchez.

Incidencias: 150 espectadores en las gradas del Antonio Almendro. Nutrida presencia de aficionados visitantes.