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Imagen aérea del estadio Vicente Calderón.
La final de la Copa del Rey, que disputarán el Barcelona y el Deportivo Alavés el próximo sábado 27 de mayo, se celebrará en el estadio Vicente Calderón, que acogerá así su último partido oficial antes de ser abandonado por el Atlético de Madrid. La noticia ha sido anunciada este lunes por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). De esta manera, el duelo entre los azulgranas, ganadores de 28 trofeos, y los vitorianos, que disputarán su primera final del torneo del KO, será el último encuentro que presencie el viejo Calderón, que se jubilará como estadio del Atlético antes de que éste se traslade la próxima temporada al Wanda Metropolitano. El Alavaés había solicitado de manera oficial que el partido se jugase en San Mamés, pero el Athletic Club tuvo que rechazar la propuesta por la proximidad de la celebración del concierto de Guns N’ Roses en el recinto el 30 de mayo, un acontecimiento que exige un complejo montaje.