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Momento en el que los jugadores del primer plantel verdiblanco realizan uno de los circuitos físicos planteados por Marcos Álvarez. / RBB.
El nuevo preparador físico del Real Betis, Marcos Álvarez, ha tomado el mando en las dos primeras sesiones de entrenamiento que el equipo de Gustavo Poyet ha realizado en las instalaciones del Marbella Football Center, en la Costa del Sol, donde el equipo permanecerá concentrado hasta el próximo día 19 de este mes, justo antes de partir a tierras germanas donde se llevará a cabo la segunda parte del stage de pretemporada.
Un trabajo físico que vino marcado por distintos circuitos, algo habitual en la vuelta al trabajo de los equipos, pues antes de echar a rodar el balón, hay que recuperar el buen tono físico que disminuye después cada verano con la llegada de las vacaciones y la ausencia de la competición.
Lo más destacado del trabajo en Marbella hasta el momento han sido los avances presentados por Felipe Gutiérrez. El chileno, que trabaja al margen del grupo, avanza poco a poco de su lesión de rodilla y en unas semanas debe estar ya a las órdenes de Gustavo Poyet.
La ausencia de los descartes –a excepción de Portillo y Westermann– en el trabajo de preparación que está llevando a cabo el Betis en tierras malagueñas, ha propiciado, tras la marcha de Alfred Ndiaye, que uno de los mediocentros defensivos que estaban en esa lista, incorporarse al trabajo con el resto de compañeros. En este sentido, Xavi Torres, que anda buscando equipo para la próxima temporada, ha sido llamado a filas y esta misma noche debe incorporarse a la concentración en Marbella. Algo que no cambia, al menos por el momento, su situación de jugador transferible.