Cheptegei aguanta el muro al relevo generacional en Itálica

En un día luminoso, temperatura extraordinaria y lleno hasta la bandera en los dominios de Adriano, el XXXVI Cross Internacional de Itálica no pudo presentarle una mejor escenografía al mítico Sebastian Coe, el mandamás de la IAAF, que está pergeñando una serie de cambios en el circuito mundial de campo a través que puedan impulsar esta especialidad. De momento, en declaraciones poco antes de colocarse el dorsal para participar en la prueba popular, ya indicó que quiere que el cross vuelva, como en las primeras ediciones, al programa olímpico (Amberes 1924 fue la última), el gran escaparate del deporte mundial y en particular del atletismo. Sin duda sería otorgarle al cross una dimensión enorme, y en ese contexto, el presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, que acompañaba al que fuera campeón olímpico de 1.500 en los años 80, junto al consejero de Turismo y Deporte de la Junta, Javier Fernández, aseguró que, en el caso de que el circuito internacional apueste por una sola prueba por país, “será Itálica”. Lo cierto que el presidente de la Federación Española de Atletismo, Raúl Chapado, aclaró que no cree que esa posibilidad cristalice, teniendo en cuenta que España es el país con el mayor número de pruebas de campo a través del mundo.

En la carrera femenina, la keniata Agnes Jebet Tirop consiguió en Itálica la revancha de Elogiar, donde la campeona del mundo claudicó ante la campeona olímpica, Ruth Jebet, en unas condiciones totalmente opuestas a las de hace una semana, donde Lilian Kisait perdió una zapatilla en el barro y así completó toda la carrera para ser tercera. En el conjunto arqueológico romano de Santiponce fue segunda, mientras la donostiarra Trihas Gebre repitió el quinto puesto. La sevillana Carolina Robles, que no se ha perdido una sola carrera en Itálica desde benjamines, fue decimoctava. Tuvo que ser atendida por las asistencias tras cruzar la meta por el esfuerzo.

Con un albero perfecto para el vuelo, la carrera masculina acabó en un sprint casi sobre la cinta, donde se impuso el subcampeón del mundo de 10.000 metros en 2017 en Londres, el ugandés Joshua Cheptegei, un atleta que tuvo el honor de escoltar al gran Mo Farah en esa final mundialista en el estadio olímpico londinense. Segundo fue su compatriota Jacok Kiplimo, un teenager como el tercer clasificado, el etíope Sellemos Barega, ganador en Elgoibar y Venta de Baños, un atleta que apunta a dominador en los próximos años de esta especialidad, en un duelo con Kiplimo, campeón mundial júnior en 2017 con solo 16 años. El primer español fue, en sexta posición, Ilias Fifa.