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Un triatleta se lanza al río en una competición celebrada en el Guadalquivir, con La Barqueta al fondo. / Efe -
Una de las ediciones de al Fiesta de la Piragua. / E. Barba (Efe) -
Un partido de kayak-polo. / A. Acedo
Es una frase mil veces repetida: Sevilla vive de espaldas a su río. Puede serlo en términos generales, pero no específicamente en el deporte y sus actividades. Otra cuestión es que la ciudad no le dé ni la relevancia y la trascendencia necesarias, porque al fin y al cabo entramos en el terreno de los deportes menos populares. Hay varios datos que avalan ese contraste, porque el Guadalquivir es la principal fuente de deportistas olímpicos que ha dado esta ciudad. Entre el remo y el piragüismo han sido ni más ni menos que 25, desde que los bogadores Enrique Castelló y José Antonio Sahuquillo, con el timonel Joaquín Real, fuesen los primeros en 1960, en la ciudad de Roma. Fue el boom de un deporte que a finales de los 60 vio nacer la regata Sevilla-Betis, que el próximo mes de noviembre va a vivir su edición número 50, el derbi del río. Y sevillano es uno de los dos componentes del único bote español que se colgó una medalla, Fernando Climent, plata en Los Ángeles 84 junto a Luis María Lasúrtegui, en un dos sin timonel.
La extraordinaria calidad de la lámina de agua de la dársena del río llevó a la Junta de Andalucía a la creación del Centro Especializado de Alto Rendimiento de Remo y Piragüismo en 1998, cuando ya desde los 70 llegaban a Sevilla algunos de los equipos nacionales más potentes del mundo, como Alemania o Gran Bretaña, para hacer su preparación invernal de cara a las pruebas del verano. Desde principios de siglo, Sevilla es centro permanente para el equipo nacional español y lugar por donde pasan los mejores remeros y piragüistas del mundo, los que triunfan después en mundiales y Juegos Olímpicos.
Frente al CEAR está la Glorieta Beatriz Manchón, una de las mejores deportistas que ha dado Sevilla en su historia, participante en cuatro Juegos Olímpicos, con tres quintos puestos. Entre Mundiales y Europeos de piragüismo, la palista del Labradores suma casi 40 preseas.
Las medallas mundialistas del remo sevillano de principios de los 80 llevaron a la ciudad a tener un reconocimiento con esos deportistas y a ese deporte de la boga que daban lustre a su imagen internacional. El Paseo de Remeros de Sevilla está justo a las puertas de uno de los clubes emblemáticos de la ciudad, el Real Club Náutico, que allí se instaló a finales de los 50, y que ha tenido una influencia extraordinaria en la vida deportiva de la ciudad. En los últimos Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro estuvo con la selección española el paracanoísta Javier Reja, uno de los mejores del mundo y referente en una entidad que lleva a cabo un programa de actividades destinadas a los discapacitados.
Pero en Sevilla se pueden practicar estos deportes y muchos otros con facilidad a través de distintos clubes y entidades. Es el caso del Club de Remo Guadalquivir 86, el Club de Remo Sevilla, el Club Piragüismo Sevilla o el Piragüismo Triana. Todos ofertan cursos en sus respectivas modalidades, con instalaciones a pie de agua, también remo o piragüismo libre, facilitando el alquiler de los botes y kayacs, e igualmente incluyen en sus ofertas otras actividades relacionadas con el río aunque no necesariamente con deportes de agua, caso de rutas ciclistas, programas de entrenamiento deportivo, etc.
Hay también empresas centradas más en el deporte de ocio con actividades en el río, que ofertan bautismos de kayak incluso con la peculiaridad de que se pueden desarrollar en horario nocturno, lo cual tiene el atractivo de poder contemplar de noche toda la zona monumental de la ciudad desde el interior del río; e incluso tomar una tapa y una cerveza bajo el Puente de Triana en un receso del paseo, como así lleva a cabo KayakSevilla.
El Instituto Municipal de Deportes impulsa cada año el programa Sevilla y su Río, que promueve la organización de una veintena de actividades y competiciones cuando llega la primavera. Incluye la Fiesta de la Piragua, donde más de mil palistas, llegados desde todos los puntos de España, toman el río en singular procesión. En ese programa están competiciones de kayak-polo a los pies de la Torre del Oro y también de uno de los deportes más populares de los últimos tiempos, el triatlón.
Con el CEAR de La Cartuja como punto neurálgico, Sevilla se ha convertido en uno de los grandes referentes del triatlón nacional. Miles de triatletas de todo el país acuden a las varias pruebas que inundan el calendario. El sector de natación se realiza en el Guadalquivir, donde la Federación Andaluza ha ido dando pasos para lograr una de sus grandes reivindicaciones durante años, la instalación permanente de una calle junto a la orilla entre el Puente de La Barqueta y el CEAR para que los triatletas puedan entrenar, algo que ya es posible en determinados horarios y días.
Y finalmente, más allá de eventos más excepcionales de wakeboard o de vela (Ascenso del Guadalquivir que organiza el Náutico Sevilla), como también de competiciones de traineras, otro de los deportes de alto rango de participación es la pesca deportiva. Si el piragüismo y el remo han organizado campeonatos de España, de Europa y del Mundo en Sevilla, también el Guadalquivir es escenario permanente de competiciones regionales y nacionales de pesca en sus distintas modalidades. En 1997 se disputó un Mundial con representantes de 25 países y alrededor de 400 participantes. El Puente de la Barqueta es uno de los espacios únicos, considerado escenario técnico con una gran variedad de peces: carpas, barcos, pescadores, anguilas, lubinas y albures.
El Club de Pesca El Giraldillo de Sevilla consiguió el año pasado el título mundial de pesca de mar costa. Diferntes clubes y deportistas sevillanos son en buen número campeones de España. La Escuela de Pesca de Sevilla ofrece cursos cada año para todas las edades, donde iniciarse en esta actividad.