Muere Manolo González, pura pasión por el tenis

Entrañable colaborador de El Correo durante más de 20 años, fue jugador, directivo y organizador, sembrando tenis allí donde estaba de forma altruista.

09 mar 2017 / 00:30 h - Actualizado: 09 mar 2017 / 00:37 h.
"Tenis"
  • Manolo González, en el centro junto a Felisa, su esposa, en la entrega de trofeos de su torneo en la AR Río Grande.
    Manolo González, en el centro junto a Felisa, su esposa, en la entrega de trofeos de su torneo en la AR Río Grande.

El tenis sevillano y andaluz perdió ayer, a los 86 años de edad, a Manolo González, una de esas personas que representan lo más puro de la pasión por un deporte al que entregó su vida de forma altruista. Colaborador de El Correo de Andalucía durante más de 20 años, Manolo se encargó a través de estas páginas de dar visibilidad a los torneos de base, de aficionados y de veteranos que se organizaban en Sevilla y provincia, y en esta redacción de Deportes sembró su entusiasmo sin límites por el tenis como hacía en cada pista, en cada club, en cada conversación.

En el Militar, su club de siempre, fue jugador y capitán de su equipo de veteranos; durante más de 20 años formó también parte de la directiva de la Federación Andaluza de Tenis, engrosando el Comité de Competición y encargándose también del área de comunicación. En estas tres últimas décadas organizó también un torneo que llevaba su nombre, destinado a jugadores aficionados y veteranos, un grupo especial y entrañable que ha hecho de su amor por el tenis una forma de vida. Manolo González fue el primero en contar el talento de una niña de Los Palacios que apuntaba maneras, con una derecha espectacular, y que siendo alevín se proclamó campeona de España. Aquella niña era y es Estrella Cabeza, la mejor jugadora andaluza de la historia.

La Federación Andaluza de Tenis le rindió homenaje hace unos años, y le puso su nombre a una de las pistas de tierra batida del Centro de Tecnificación Blas Infante. Allí estuvo junto a su inseparable esposa, Felisa, con quien compartía su pasión, como con su hija Gloria, campeona de Andalucía y de España amateur, como con su hijo Manolo.

Optimista impenitente, afable y alegre, generaciones de jugadores de Sevilla seguro guardarán alguna foto de las cientos que regalaba. Un regalo y un honor fue tenerlo como compañero y amigo. El responso tendrá lugar este jueves a las 12 del mediodía en el tanatorio de Tomares.