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Rubén Cornejo presiona a Miguel durante el encuentro de ayer en el Fernando Argüelles. / LNFS
La experiencia suele ser determinante en este tipo de circunstancias, y UMA Antequera, que cuenta con varios jugadores de los últimos ascensos a la élite, lograba ayer con todo merecimiento en su pabellón Fernando Argüelles el regreso a la Primera división. Una final de la que el Betis Futsal debe tomar nota para el futuro, porque no ha logrado dar el nivel necesario para dar el último paso hacia el gran objetivo, por el que tendrá que pelear la próxima temporada con el bagaje valioso que ha acumulado en la que ayer concluyó.
El primer acto en el abarrotado pabellón Fernando Argüelles vino a darle continuidad a lo acontecido en el primer duelo en Amate. UMA Antequera ofrecía un nivel superior de intensidad, de chispa, de concentración, incluso de atrevimiento. En la cabeza de los jugadores de Daniel Ibañes seguía el rastro del varapalo que supuso el 2-6 del primer partido. Trasladado al juego, un punto de tensión muy poco beneficiosa. Tardó poco el conjunto de Moli en ponerse por delante, una acción del pivote granadino Miguel Fernández, tercer máximo goleador de la Segunda división, que se convirtió en este primer tramo en un auténtico incordio para la defensa verdiblanca. El 15 de los malagueños encontró a Nacho Caballero para regalarle el 1-0. El Betis empezó a desperezarse y tuvo una ocasión inmejorable, tras un robo de Raúl Gómez, que corrió en ventaja por la banda izquierda para ceder en el otro costado a Eric Pérez, que recortó bien hacia adentro pero disparó ante Cone ajustado al palo pero fuera. El partido enloqueció un tanto, y de un más que posible penalti sobre Raúl Gómez, en otra acción de recuperación, se pasó al 2-0, cuando en la contra Óscar recortó y asistió a Dani Ramos, que anotaba su tercer gol de la eliminatoria (m.12).
No había corrido un minuto desde ese nuevo jarro de agua fría cuando el cierre cordobés Juanra Ruíz se marcó un jugadón con complicidad bética, que permitió que tras cortar un balón en su área se recorriera todo el campo y definiera con precisión en el mano a mano ante Raúl Jiménez.
Como en Amate, había una diferencia abismal en la forma de aprovechar las oportunidades, aunque el Betis Futsal fabricaba hasta entonces muchas menos que en aquel encuentro. En situación de portero-jugador de los de Ibañes, UMA estrelló un balón en el larguero tras recuperar en su propia área, y el partido se fue al descanso con una dificultad extrema para los visitantes, que necesitaban ganar para formar el tercer y definitivo partido.
El regreso a pista no fue diferente, pero una acción individual de calidad extrema de Raúl Gómez enchufó al Betis como no lo había hecho hasta entonces. Giró sobre su eje para burlar la marca y escorado soltó un zurdado casi sin ángulo que colocó en la escuadra de la portería de Cone. Quedaba mucho por delante. Chano la rompió tras un buen movimiento de balón de los de Ibañes y Cone firmó un nuevo paradón. El malagueño ha sido, más allá del mejor juego colectivo de su equipo, absolutamente decisivo en esta serie. Raúl Gómez e Ivi no culminaron otra doble ocasión y en fase de portero-jugador, el ala albaceteño no tuvo más remedio que tirarse con todo para evitar el gol de Miguel y vio la roja. El Betis aguantó bien y ya en igualdad Ivi estrelló hasta tres veces el balón en los palos, en un acoso fruto de los mejores minutos de los verdiblancos en esta final. Pero ya era demasiado tarde.