Varsovia, paréntesis en los despachos

Muchos son los temas de actualidad en un Sevilla al que sólo le quedan dos partidos para dar por finalizada su magnífica temporada. Todos ellos temas muy importantes para el futuro de la entidad en lo deportivo, pero todos, sin excepción, secundarios en comparación con lo que hay en juego en Málaga y Varsovia. La continuidad de Unai Emery, la renovación de José Antonio Reyes, el cierre de varias operaciones de refuerzo encaminadas, la confirmación oficial de una ya cerrada –Krohn-Dehli– y el plan de actuación en cuanto a ventas. Absolutamente todo ha quedado en stand by ante el capítulo final en la Liga y la finalísima de la Europa League ante el Dnipro del día 27, la cita más importante de la temporada.

Tanto Monchi como José Castro han convenido que no hay que forzar ninguno de los frentes abiertos en estos días. Sobre todo porque afectan a piezas importantes de la plantilla como el entrenador y jugadores como Reyes o Mbia, que acaban contrato. En el caso de Unai, todos en el Sevilla intuyen que si el equipo se clasifica para la próxima Champions League, ni siquiera el Milan en una hipotética segunda intentona, podría convencer al vasco para dejar en la cuneta el año de contrato que tiene firmado con los nervionenses. Emery ha emplazado a la dirigencia sevillista a retomar las conversaciones en un par de semanas y Castro le emplazó a dar una respuesta definitiva el lunes después de la final de Varsovia. Ayer La Gazzetta dello Sport insistía de nuevo en Emery como miembro de la terna de entrenadores que pueden sustituir a Pippo Inzaghi. Circunstancia que no inquieta por Nervión más allá de lo justo y necesario. Todos confían en el buen hacer de un Emery que siempre ha ido de cara con Castro y Monchi.

El de San Fernando, junto al presidente, tienen más claro otros dos asuntos relativos a la plantilla: Reyes y Mbia. El utrerano, como ya informó este periódico hace dos semanas, se muestra reacio a renovar tal y como se lo ha planteado el club, pero igualmente sabe que la postura de Monchi es poco propensa a variaciones. Un ‘o lo tomas o lo dejas’ que no se sabe aún bien cómo acabará. De momento el 10 está parando cualquier ofrecimiento que le llega del extranjero. Todo lo contrario que Mbia, quien está coqueteando con equipos de países árabes. Su situación es como la de hace un año: el Sevilla, salvo nueva sorpresa, no podrá hacer frente a su altísima ficha. El fichaje de Krohn-Dehli está hecho. Y otros dos encauzados. Pero todo se retomará después de Varsovia, donde se concentran todas las fuerzas del Sevilla.

Así están las negociaciones:

EMERY

-Castro quiere que Unai le conteste a la oferta de renovación el lunes después de la final

MBIA

-El Sevilla no quiere volver a pagar su alta ficha. El jugador negocia ya con equipos árabes

REYES

-Habrá reunión después de la final ante el Dnipro. No quiere irse, pero el Sevilla no piensa mejorar su oferta

KROHN-DEHLI

-Operación cerrada por Monchi, que se anticipó al Málaga. Parte de la que será la nueva medular