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Un guardia civil y un trabajador de una funeraria sacan el cadáver del hombre fallecido en La Algaba. / Raúl Caro (Efe) -
Agentes de la Guardia Civil recogen muestras en la calle. / Raúl Caro (Efe)
La pasada madrugada en La Algaba fue trágica: un presunto maltratador murió sobre las 5 de la mañana tras ser abatido por agentes de la Policía Local de la localidad que acudieron a socorrer a la pareja del fallecido al haber recibido una alerta por un supuesto caso de violencia de género. Al parecer, fue la hija de 17 años de la mujer la que llamó al teléfono de atención a la violencia de género –016– desde su domicilio de la calle Santiago. El 016 informó de los hechos al 112 que dio aviso a la Policía Local para que acudiese al lugar de los hechos.
En esta intervención los dos agentes locales que se desplazaron a la vivienda resultaron heridos al ser atacados con un machete por el finado, por lo que los dos policías ingresaron en el hospital Virgen Macarena con heridas de arma blanca, según informaron fuentes de la Guardia Civil, cuya Policía Judicial se ha hecho cargo de la investigación del suceso. El juzgado número 13 es el que lleva el caso y el que procedió al levantamiento del cadáver al encontrarse de guardia cuando se produjeron los hechos.
Uno de los agentes heridos sufre traumatismo craneoencefálico, ya que el presunto maltratador le golpeó con el machete en la cabeza. Según ha podido saber este diario, la rápida intervención de su compañero le salvó la vida. Este segundo agente tiene varias heridas defensivas –cortes en los ligamentos– y fracturas en un brazo, por lo que iba a ser intervenido quirúrgicamente. La mujer, por su parte, resultó ilesa.
El hombre, según informaron a Europa Press fuentes de la investigación, falleció en el acto tras recibir un total de tres disparos en distintas partes del cuerpo. Según esta misma versión, uno de estos impactos resultó mortal.
El finado no había sido objeto de denuncias previas por parte de su pareja ni ante la Policía, ni ante la Guardia Civil, ni el punto de información de la Mujer de La Algaba, según indicó el alcalde, el socialista Diego Manuel Agüera. El regidor señaló que no sabe «qué pasó por la mente» de este hombre y abogó por esperar a los resultados correspondientes de la prueba de la autopsia.
En este sentido, en declaraciones a Europa Press, lamentó los hechos, «porque a ningún alcalde le gusta estar en el candelero por estos hechos y menos por la muerte de un vecino. Hay que lamentar la muerte, pero lo que está claro es que si hay que decidir entre la muerte del agresor o tu propia vida, la del compañero o de la inocente, los policías lo hicieron». No obstante, reiteró que habrá que esperar al informe policial.
Vecinos de La Algaba declararon que desconocían si el fallecido maltrataba a su pareja y algunos indicaron que esta le había solicitado el divorcio.
Ante estos hechos, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, insistió en que es urgente que el pacto nacional contra la violencia de género «sea una realidad», un asunto que se introdujo en la pasada Conferencia de Presidentes, porque hay «muchísimas cosas que hacer y muy poco tiempo».
En declaraciones a los periodistas tras realizar una visita a la Base del Grupo de Emergencias de Andalucía (GREA) en Los Palacios y Villafranca, Díaz apuntó que es evidente que el inicio de este año no está siendo «bueno» por el número de víctimas y de actuaciones. En su opinión, hechos de este tipo «nos dicen que tenemos que poner todos los instrumentos que tenemos a nuestro alcance y mejorar la coordinación y también la parte judicial, de manera que se aceleren muchísimo los procedimientos que afectan a violencia de género porque se trata de algo que afecta a la seguridad y a la vida de las mujeres». Asimismo, consideró que hay que mejorar bastante la formación en determinados cuerpos que acceden y que trabajan e intervienen con estas mujeres.
Por su parte, la consejera de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, María José Sánchez Rubio, destacó el «perfecto» funcionamiento de los mecanismos de control de casos de violencia de género. Manifestó, asimismo, la «repulsa» de la administración autonómica ante situaciones de esta índole y destacó el trabajo, «en muchos casos arriesgado», de las fuerzas y cuerpos de seguridad. Finalmente, pidió unir esfuerzos para que esto «no vuelva a ocurrir»