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Mesa de la negociación del pacto de investidura entre PP y C’s, con Girauta en primer plano. / F. Alvarado (efe)
El PP, que sigue negociando un pacto con Ciudadanos (C’s), hizo ayer un llamamiento al PNV para que permita la investidura de Mariano Rajoy, pero el partido de Albert Rivera advirtió a los populares de que no permitirá que se otorguen privilegios a las fuerzas políticas nacionalistas.
Los equipos negociadores del PP y de Ciudadanos continuaron sus conversaciones y ambas partes son optimistas. Sobre todo el PP, que destacó que ya se han consensuado medio centenar de medidas, aunque C’s recuerda que si no hay acuerdo global el sábado no servirán los parciales.
Y mientras sigue este proceso, el PP ya indicó que su líder, Mariano Rajoy, esperará a tener avanzado el acuerdo con C’s para llamar al secretario general y portavoz del PSOE, Pedro Sánchez, y pedirle su colaboración.
En esta jornada, el presidente del PP vasco y candidato a lehendakari, Alfonso Alonso, hizo un llamamiento al PNV que no ha sido del todo bien recibido por C’s. Alonso emplazó al PNV a demostrar que apuesta por la estabilidad y las instituciones saliéndose del «frente del no» a la investidura de Rajoy y pidiéndole que «no bloquee» el país.
Ciudadanos no ha tardado en comentar este llamamiento del PP al PNV. La dirigente catalana de C’s Inés Arrimadas consideró que la «negociación profunda» debe hacerse entre los partidos constitucionalistas y señaló que su partido no aceptará que se busque la abstención del PNV o de Convergencia «a cambio de algo, de mirar hacia otro lado» o de «privilegios».
Igualmente, el vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, advirtió de que el PP no puede llegar a acuerdos con otros partidos que sean «incompatibles» con el que firmen, si se da el caso, estas dos formaciones. Y añadió que, en el caso del PNV, los asuntos que está tratando su partido con el PP son «difícilmente compatibles» con la formación vasca.
Los equipos negociadores de PP y Ciudadanos, que anteayer acabaron su reunión a las ocho de la tarde pero siguieron intercambiándose documentación hasta la madrugada, retomaron las conversaciones por la mañana. Por la tarde trabajaron por separado.
Mientras siguen aparcadas para el final de la negociación las cuestiones en las que hay algún escollo –los modelos de contratación y las cuotas de autónomos–, en el curso de las conversaciones han surgido otras diferencias, como la renta de subsistencia que pide Ciudadanos, que el PP quiere estudiar y cuantificar, según fuentes conocedoras de las conversaciones.
Ciudadanos también apreció que puede haber «fricción» en la lucha contra el fraude, según explicó Villegas. Y es que C’s quiere recuperar el dinero que se «perdonó» en la amnistía fiscal, el que «se cobró de menos», que su partido cuantifica en 2.800 millones y que según Villegas se podría destinar a políticas sociales.
Pese a las diferencias, Fernando Martínez-Maillo subrayó que su partido es «moderadamente optimista» ante la posibilidad de alcanzar un acuerdo global y volvió a asegurar que no hay ninguna diferencia «insalvable».