El número de nacimientos en España se redujo en el primer semestre de este año un 0,8 por ciento, mientras que crecieron un 10,5 por ciento los fallecimientos, lo que significa que en este país han muerto más personas de las que han nacido.

Según datos difundidos hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el crecimiento vegetativo de la población (diferencia entre nacimientos y defunciones) se redujo en 19.268 personas entre enero y junio, periodo en el que nacieron 206.656 niños y murieron 225.924 personas.

Con el descenso de la natalidad se confirma la tendencia descendiente iniciada en 2008, pese a un leve repunte registrado en 2014.

En su informe, el Instituto Nacional de Estadística destaca que las muertes del primer semestre se concentraron, sobretodo, en los meses de enero, febrero y marzo, cuando murió un 16,9 % más de personas que en el mismo periodo del año anterior.

El número de nacimientos de madre extranjera supuso el 17,4 % del total, frente al 17,8 % del mismo semestre del año pasado, con lo que se mantuvo una ligera tendencia descendente.

El INE destaca también que entre enero y junio de este año se registraron 69.671 matrimonios, un 1,2 % más que un año antes y, de ellos, un 2,6 % correspondieron a parejas del mismo sexo (1.803 matrimonios).