Feijóo renuncia a liderar el PP y descoloca a varios dirigentes

Con la incertidumbre de Sáenz de Santamaría y Cospedal, buena parte de la formación teme que se desenlace una guerra interna

18 jun 2018 / 22:35 h - Actualizado: 18 jun 2018 / 22:36 h.
  • Alberto Núñez Feijóo durante su intervención. / Xoán Rey (Efe)
    Alberto Núñez Feijóo durante su intervención. / Xoán Rey (Efe)

El PP va deshojando su margarita. El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, era uno de los nombres que más fuerte sonaban en las quinielas de Génova para liderar el partido y suceder a Mariano Rajoy, cuyo desalojo de La Moncloa lo ha llevado a retirarse de la política y recuperar su plaza de registrador de la propiedad. Muchos estaban esperando que Feijóo se lanzara a la piscina, pero, tras un ambiguo discurso, terminó por decir: «No puedo fallar a los gallegos porque sería, además, fallarme a mí mismo».

Así, y con la incredulidad de muchos de los asistentes a la junta directiva autonómica del PP en Santiago de Compostela, el presidente gallego renunciaba a liderar un PP llamado a una urgente regeneración. Feijóo sacó pecho y recordó que es presidente de Galicia «porque mi único pacto ha sido con los gallegos». Asimismo, defendió que seguirá «trabajando por el PP desde el PP de Galicia».

Con la decisión de Feijóo –que ha provocado sorpresa entre varios dirigentes populares–, la exvicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y la exministra de Defensa, Dolores de Cospedal –a la sazón secretaria general del PP–, tienen vía libre para presentar sendas candidaturas a presidir la formación conservadora. No obstante, ninguna de las dos aún no han mostrado sus intenciones, si bien Cospedal tiene hoy una oportunidad única, pues preside la junta directiva regional del partido en Castilla-La Mancha.

El hecho de que las dos mujeres más fuertes del PP, y también las más enfrentadas públicamente, puedan concurrir a unas primarias, ha provocado el temor en no pocos dirigentes de la formación popular, que ven la posibilidad de ir a una guerra interna. Y es que todas las miradas estaban puestas en Feijóo, un candidato de «consenso», el «favorito», el que cuenta con experiencia de gestión y ha encadenado tres mayorías absolutas consecutivas. Pero todo se fue al traste con su lacónico «Ya está, ya lo he dicho» y algunos barones del PP temen un choque de trenes entre Sáenz de Santamaría y Cospedal.

Este temor parece estar declinando la balanza a favor de Pablo Casado, el mediático diputado abulense que este lunes anunció su candidatura a través de las redes sociales. Muchos ven en el vicesecretario de Comunicación del PP la figura que encarna la «tercera vía» capaz de contrarrestar la polarización entre Sáenz de Santamaría y Cospedal, si bien adolece de experiencia frente a las posibles candidatas.

Otro de los pesos pesados del PP que ha anunciado que disputará la presidencia del partido es el exministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, quien instó al resto de candidatos a explicar «para qué se presentan, por qué se presentan, qué quieren hacer con el partido y para qué quieren el partido». También lanzó un dardo a Casado: «Esto es un concurso de ideas, no de belleza».

El plazo de presentación de avales finaliza este miércoles a las 14 horas. Además de García-Margallo y Casado, se han presentado el secretario de Relaciones Internacionales del PP, José Ramón Hernández, y el expresidente de Nuevas Generaciones de la Comunidad Valenciana, José Luis Bayo.