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Unas 100.000 personas acudieron a la manifestación convocada por Jusapol en Madrid, el pasado mes de noviembre. La próxima será en Barcelona. / Efe
La clave para cerrar una longeva reclamación de la Policía Nacional y la Guardia Civil está en los Presupuesto Generales de 2018. De su aprobación y de la partida que el Gobierno central destine a equiparar los salarios de la plantilla de estos cuerpos policiales con la de otros, como las policías autonómicas. El Ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, mantiene hoy una reunión decisiva con los consejos de la Policía Nacional y la Guardia Civil para exponerle sus propuestas. Habrá líneas rojas que los representantes de los agentes no van a permitir que sean superadas, más aún cuando están más cerca que nunca de lograr una reivindicación que durante más de 25 años ha sido ignorada por los diferentes gobiernos.
El año 2017 acababa con el compromiso de Zoido de lograr la equiparación entre estos dos cuerpos, los que menos ganan de todos los existentes en España, incluida la Policía Local. El ministro se mostraba optimista, pese a que el buen fin de un acuerdo penda directamente de que salgan adelante los presupuestos Generales, después de una reunión celebrada el pasado 26 de diciembre con los representantes de los sindicatos y asociaciones de ambos cuerpos no solo con lograr una equiparación de sueldos, sino también de mejorar los medios materiales y las infraestructuras policiales.
Con la promesa sobre la mesa, el objetivo de la reunión de hoy es lograr un documento de trabajo que será presentado a los representantes sindicales y que versará sobre las cuestiones citadas. Según el Sindicato Unificado de Policía, este documento debe plasmar los plazos –ellos vienen reivindicando que sean en tres años–; la partida presupuestaria que se destinará, y sobre la que Zoido se mostró «muy optimista» la partida pues trasladó que sus conversaciones con Hacienda están «muy avanzadas»; y los conceptos salariales a mejorar. El sindicato explica que la intención del Gobierno es que el acuerdo esté firmado antes del 20 de enero, se firmaría ese acuerdo.
Sin embargo, aunque parezca que la situación así planteada parezca que todo está logrado ya, nada más lejos de la realidad, pues las diferentes organizaciones ya han anunciado que no aceptarán cualquier acuerdo, especialmente en lo que respecta en las partidas presupuestarias. No aceptarán ningún acuerdo que no sea 500 millones anuales durante tres años destinados de forma íntegra a la equiparación, es decir, que las mejoras de materiales y en infraestructuras salgan de otro capítulo.
De momento, para el próximo 20 de enero hay convocada una concentración, que no se va a retirar, y a la que asistirán todos los sindicatos policiales y asociaciones de guardias civiles, así como Jusapol (Justicia Salarial Policial), una entidad nacida este verano y que aglutina bajo sus siglas a policías nacionales y guardias civiles por un objetivo común.
Pero la propuesta de Zoido no solo será mirada con lupa por parte de las sindicatos y asociaciones policiales, sino también por las fuerzas políticas, al extremo de que de la misma dependerá la aprobación de los Presupuestos Generales. Así, lo ha expuesto ya Ciudadanos, que ha supeditado su voto a favor a que se incluya en los mismos. Esta reivindicación, que la formación naranja ha hecho suya, ya incluso fue un compromiso expresado por Mariano Rajoy en 2009, como ayer mismo le recordó en el Congreso el secretario general de Cs, Miguel Gutiérrez.
Este se dirigió directamente al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que quien en definitiva tiene la última palabra sobre este asunto. «Usted y yo sabemos que no depende de usted, pero que tampoco es capaz de trasladarle al señor Montoro, de forma adecuada, esta exigencia que le hacen los policías y guardias civiles», señaló el representante de la formación naranja. Zoido insistió en que el compromiso del Gobierno es comenzar este año con la ansiada equiparación, incluyendo ya una partida para comenzar con este trámite por el que agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional acaben cobrando lo mismo que los agentes de los cuerpos autonómicos.
Sin embargo, las reclamaciones de los agentes van más allá de la equiparación salarial con el resto de cuerpos. Es el primero de sus planteamientos: eliminar la brecha salarial de unos 600 euros brutos mensuales entre unos y otros. Pero otro de los puntos importantes es lograr jubilaciones sin perder poder adquisitivo. «Tenemos el caso de algún compañero que no puede jubilarse porque tiene hijos a su cargo y si se jubila no llega», asegura Raúl López, portavoz de Jusapol en Sevilla.
Las horas extraordinarias remuneradas correctamente es otro caballo de batalla de ambos cuerpos pues, «los índices correctores son muy bajos, las autonómicas cobran entre un 200 y 300 por ciento más que nosotros». Para un policía nacional, señala López, «trabajar un día extra supone unos 80 euros, aunque sea la noche de un festivo o de un fin de semana». Muy lejos, dice, de los casi «300 euros que puede llegar a alcanzar un Mosso». Asimismo, solicitan que las pagas extraordinarias «se cobrarlas íntegras, es decir dobles». «Lo único que pedimos es que a igual trabajo, igual remuneración», destaca López, cuya asociación destaca siempre que el sueldo de los agentes autonómicos también sale de los Presupuestos Generales.
Según los documentos que maneja Jusapol, un Mosso de la escala más básica cobra 2.468,67 euros, lo que supone un total de 34.402 euros anuales. Mientras que en el caso de la Policía Nacional la cuantía a percibir neta está sobre unos 1.500 euros y de algo menos en el caso de los guardias civiles, lo que hace que anualmente perciban unos 10.000 euros menos.