Fenómenos paranormales en el hotel encantado

En Sevilla encontramos lugares que evocan a la relajación, a desconectar, a vacaciones, son los hoteles y dentro de uno de ellos vamos a encaminar nuestros pasos para llevarles a nuestra siguiente investigación

10 feb 2018 / 23:19 h - Actualizado: 11 feb 2018 / 18:27 h.
"La aventura del misterio"
  • Arriba, pasillo del hotel encantado. Abajo, casa investigada. / El Correo
    Arriba, pasillo del hotel encantado. Abajo, casa investigada. / El Correo
  • Fenómenos paranormales en el hotel encantado

Quizás uno de los factores más determinantes de la investigación paranormal en Sevilla es el tratar de conseguir esa prueba, la prueba definitiva, que nos garantice que lo paranormal, realmente existe. Antaño los investigadores, hace décadas iban con un tablero, la ouija, como efímero y subjetivo garante de esa paranormalidad manifestada en un determinado lugar, en otros, más pasado el tiempo, con las grabadoras con las que poder recoger esos sonidos del más allá, las voces del misterio o psicofonías, cuyo desconocimiento sobre su origen aún nos hace retroceder décadas.

Hoy día, en pleno siglo XXI, disponemos de muchos elementos que nos pueden ayudar a dilucidar si, realmente, nos encontramos ante un caso que puede plantearnos la duda sobre la naturaleza de un fenómeno que se vive en un determinado lugar.

Otro factor importante dentro de la investigación es del equipo que te rodeas, independientemente de la tecnología empleada, siempre el factor humano es determinante. He investigado con los mejores de este país, incluso a nivel internacional, desde Lorenzo Fernández Bueno o Iker Jiménez, pasando por Luis Mariano Fernández y tantos amigos que uno ha ido haciendo en el mundo del misterio. No obstante dentro de la investigación paranormal en Sevilla también hay personas muy destacadas como el grupo GPS, con Lorenzo Cabezas y Carmen Bravo o el protagonista de hoy: Miguel Ángel Paredes queriendo hacer también la mención a otros muchos investigadores y grupos serios de investigación en la ciudad y en la provincia.

Buscando el misterio en el hotel encantado de Sevilla

El fenómeno paranormal, su manifestación, es atemporal y no atiende a épocas del año, ni a posición social, ni a dinero, ni a trabajo... Es espontáneo, tanto que ni víctimas del misterio ni investigadores pueden determinar cuándo se va a producir ni donde...

En ocasiones lo que surge como un momento de disfrute, de felicidad, puede acabar con situaciones de pánico y terror... Situaciones que ponen a la persona al límite de sus posibilidades y que hacen enfrentarse a sus peores de sus miedos.

En Sevilla encontramos lugares que evocan a la relajación, a desconectar, a vacaciones, son los hoteles y dentro de uno de ellos vamos a encaminar nuestros pasos para llevarles a nuestra siguiente investigación.

No hace demasiado tiempo recibimos la llamada, mi amigo el investigador Miguel Ángel Paredes y yo, de un viejo amigo trabajador de un hotel sevillano donde suceden hechos que, cuando menos, se podrían calificar de inexplicables.

En ese momento se nos invitó, con discreción y cautela, a pasarlos por el edificio y realizar una investigación privada que pudiera determinar que estaba pasando. Pero antes debíamos conocer el alcance que tenía en virtud de las experiencias de aquello que trabajan en el interior del mismo. Ni ubicación ni nombre del hotel estamos autorizados a desvelar por confidencialidad con los testigos, pero lo vivido en su interior impresiona.

En el hotel tenemos acceso a los protagonistas, a aquellos que testimonian haber vivido hechos que carecen de explicación, así uno de los trabajadores nos comentaba que en la zona lavanderia «escucho ruidos muy extraños, como si dieran golpes, se oyen pisadas y susurros....», inicialmente pensó que «podría ser de cualquier cliente que se encontrara por la zona y no le di mucha importancia así que seguí con lo que estaba haciendo pero en esa misma zona ese tipo de ruidos es ya usual y a todos nos inquieta».

Otro de los trabajadores nos comentaba que «uno de los momentos más inquietantes que pude vivir, fue cuando me dirigí a la cuarta planta para dar una ronda y comprobar que todo estaba en orden», el testigo emocionado, entre lágrimas, prosigue «una vez terminada la ronda y fui a bajar a la planta inmediatamente inferior para realizar la misma operación, estando allí pude escuchar un ruido en una de las habitación era la número X47 que se encuentra a mitad de dicha planta aproximadamente». El testigo se acercó a la habitación y «ese ruido continúa por lo que decido abrirla y comprobar que es lo que ocurre ya que dicha planta estaba vacía y no había clientes en ese instante, fue cuando vi como la televisión estaba en funcionamiento, que es una cosa muy extraña ya que, como bien sabéis, las habitaciones en la mayoría de los hoteles funciona con tarjetas que se colocan en la entrada para tener electricidad y en ese instante no había ninguna tarjeta colocada para dicho funcionamiento». El empleado se dispuso a apagar la televisión y salir de dicha habitación tras de lo vivido que le dejó impresionado.

Unos días después fue a dirección a indicar la anomalía en el funcionamiento del aparato y a hablar de lo sucedido, desde la dirección sólo comentaron que “lo iban a observar y comunicárselo al personal de mantenimiento ya que «podría ser un mal contacto, sin más», tal vez sin conceder importancia al hecho o pensar que lo inexplicable, uniendo otras experiencia, habita en su establecimiento.

Pasaron dos semanas y este mismo empleado se dispuso a hacer la misma ronda cuando le volvió a suceder lo mismo: «ya estaba con la mosca detrás de la oreja y volví a informar a dirección que me dijo que no podía ser pues el personal de mantenimiento lo había revisado. Desde dirección se dirigieron a dicha habitación a comprobar, con sus propios ojos, lo que le había comentado y no vio nada raro», pero en un instante iba a suceder algo tan extraño que haría cambiar de idea a los responsables: «cuando se dispuso a cerrar la habitación el teléfono comenzó a sonar, el hombre descolgó el aparato y no había nadie al otro lado, pensó que era el personal de recepción que quería comentarle algo... era muy extraño ya que entre empleados y dirección se comunican a través de walkies. Bajó a recepción y se lo comentó al personal que en ningún momento le había llamado al teléfono de la habitación; al cabo de unos días la dirección volvió a comprobar dicha habitación y volvió a suceder lo mismo, descolgó y no contestó nadie al otro lado del teléfono».

En muchos hoteles los dueños, o propietarios (a excepción de cadenas hoteleras), viven en dicho hotel o en alguna vivienda colindante para poder controlar el negocio, en nuestro caso los dueños del hotel viven muy cerca del mismo, curiosamente tras el fallecimiento de uno de ellos comenzaron a suceder hechos extraños en el mismo.

Después del fallecimiento el cargo de dicho hotel pasó a manos de uno de los hijos decidiendo trasladar algunos enseres de esa vivienda a dicho hotel para utilizarla de decoración y cambiarla un poco. Cuando la dirección encargada del hotel se puso en contacto con uno de los propietarios para comentarle lo sucedido, este se dirigió a allí para comprobar lo que le estaban contando, cuando entró en dicha habitación le sonó también el teléfono, al otro lado no había nadie, pero en la habitación, curiosamente, había parte de los objetos de la casa usados de adorno y aquel teléfono que sonaba era el mismo que se encontraba en la vivienda de sus padres... ¿Casualidad?

Tomó la decisión de cambiar el teléfono de habitación y, de momento, parece que los fenómenos han cesado. Surgen muchas preguntas muchas de ellas jamás tendrán respuestas: ¿Será el viejo propietario del hotel el que llama desde el más allá? ¿Será el mismo el que enciende la televisión para llamar la atención? ¿Es una simple casualidad que suene ese teléfono que era el que se encontraba en su casa?

En muchas ocasiones, dicen los expertos, que los fantasmas se vinculan emocionalmente a lugares y objetos que se tuvieron en vida y este caso investigado puede ser un buen ejemplo de ello.

Fenómenos paranormales en una vivienda en Sevilla

Junto al investigador Miguel Ángel Paredes nos encaminamos un lugar, al corazón del misterio para una familia que ha pasado terribles momentos en su interior... En muchas ocasiones se producen fenómenos paranormales, misteriosos, en el lugar más íntimo y donde menos nos podemos esperar, en esta ocasión nos vamos a trasladar a un barrio sevillano, a una vivienda privada y activa están ocurriendo fenómenos extraños.

Miguel Ángel Paredes relataba: «fuimos al barrio de Rochelambert (distrito El Cerro-Amate) donde una amiga íntima me llamó por teléfono para comunicarme que en su casa estaban ocurriendo cosas muy extrañas pidiéndome que si podría pasarme por su casa y comprobar que es y la razón por el que le ocurre eso».

Así, nuestro investigador, proseguía: «estando en la vivienda mi amiga comienza a relatarme las experiencias que están viviendo tanto ella como el resto de su familia. Comienza a narrarme que ha escuchado pasos, susurros, golpes y me comenta que una de las noches uno de sus hijos pequeños se quedó dormido en el salón y ella decidió llevarlo a su cama colocando una cámara para vigilar, el típico controla-bebés, que son las típicas webcam para controlar a los niños pequeños» lo imposible se materializa cuando «miro a través de ella y observo en la imagen a un niño que no era el mío, en ese momento el niño pequeño se puso a llorar como de pánico o algo», relataba la aterrada testigo completando el relato del investigador sevillano.

Miguel Ángel Paredes también comenta como «estando, en varias ocasiones, en el salón de la casa las puertas de dicho espacio, que divide ese lugar del pasillo, se le ha abierto y cerrado sin que nadie se encontrara en ese instante ahí o actuara sobre ella».

No son las únicas experiencias que ha tenido nuestra protagonista en la vivienda: «en una de las ocasiones he sentido como alguien arrastrara los pies por el pasillo y no había absolutamente nadie; en otra ocasión una radio, que tiene colocada en la cocina, estando encendida, pues se encontraba escuchando música en ese momento, se detuvo completamente, de buenas a primeras, cuando se dirigió a la cocina para comprobar la razón por la que no funcionaba y comenzó a sonar con un volumen más fuerte del que ella lo solía tener».

Siguiendo con la sucesión de experiencias en el interior de la casa el investigador me indica: «en una de las ocasiones me comentó que estando asomada en la ventana, para tomar un poco de aire, cuando entró para dentro de la casa y quitarse de la ventana y meterse en el salón, notó como algo o alguien le coloco detrás una mesita baja que tenía que le impedía quitarse de ese lugar».

En otra ocasión «una de las veces que se encontraba con su madre en el salón le preguntó a la madre sobre que hacia la niña escondiéndose debajo de la mesa y la respuesta de la madre fue sorprendente: ‘la niña no está ahí, ahí no hay nadie’, la caras puedes imaginártelas».

La mujer asentía con la cabeza aquellos comentarios de Miguel Ángel Paredes que repasaban añadiendo otras experiencias vividas, entre ellas quiso confesarnos una que calificó como la más impactante: «en otra ocasión he podido escuchar a una de sus hijas hablar con alguien –el típico amigo imaginario que suelen tener algunos niños– pero lo más impactante es cuando, encontrándose dormida en su habitación, un susurro de algo o alguien hizo que me despertara... Al despertar me sentí observada y, en ese momento, miré a la puerta donde vi, perfectamente, la silueta de un niño mirándome».

Comenzó una intensa investigación en el que tanto Miguel Ángel Paredes como mi persona dispusimos todos el material necesario para realizar la misma: detectores de presencia, cámaras de vídeo, grabadoras, medidores de campo electromagnético, cámara Kinect, sensores, Spirit Box, Spirit Radio, Rem-Pod, entre otro equipo técnico.

Fueron momentos intensos en los que la misma tensión y nervios de la familia distraían nuestros propósitos. Tras permanecer toda la noche en el interior de la vivienda, una vez sometido todo a estudio y analizando las diferentes pruebas hemos podido verificar que en ese lugar hubo, en otros tiempos, hechos luctuosos y, quizás pudiera tener alguna relación con lo que esta familia vive pero una serie de preguntas surgen... ¿Cuál es la razón por la que se aparece ese niño? ¿Será un fenómeno de fantasmogénesis o de poltergeist? ¿Por qué se manifiesta? ¿Qué relación guarda con el lugar? Preguntas que, de momento, no tienen respuesta.

En las narraciones de lo paranormal a menudo nos encontramos con ese tipo de historias que siempre cabalgarán entre la leyenda y la realidad, entre la duda y la negación, en lo fraudulento y lo paranormal.