Los partidos reunidos hoy en el Congreso tras el último atentado etarra se han comprometido a "responder con unidad y firmeza" a ETA y han acordado "combatir con coraje y fortaleza democrática" a la banda hasta "derrotarla definitivamente a través de la fuerza exclusiva del Estado de Derecho".
En estos términos está redactado el texto del documento firmado por todas las fuerzas políticas y leído por el portavoz socialista, José Antonio Alonso, quien ha comparecido ante los medios de comunicación acompañado de todos los signatarios: los partidos con representación parlamentaria, los sindicatos y la patronal.
"ETA vuelve a desafiar a los demócratas, y de nuevo queremos decir que los terroristas jamás conseguirán sus objetivos", añade la declaración, en la que se advierte a los autores de la muerte del guardia civil Juan Manuel Piñuel que "sólo les espera la aplicación de la ley, la acción policial y el ejercicio de la justicia".
El documento ha sido acordado en una reunión de apenas media hora que ha propiciado una foto poco habitual en los últimos años: los representantes de todos los partidos sin excepción, juntos y sin expresar matices, para presentar una declaración unánime contra ETA. "Los firmantes vamos a seguir defendiendo la vida y la libertad, y vamos a combatir con coraje y fortaleza democrática a la organización terrorista ETA hasta derrotarla definitivamente a través de la fuerza exclusiva del Estado de Derecho", dice uno de sus párrafos.
Además de condenar el último "atentado criminal" de ETA y de expresar su condolencia y solidaridad con la familia del guardia civil fallecido, las fuerzas políticas y los agentes sociales, destacan que la organización terrorista ha asesinado "a un servidor público, a un defensor del Estado de Derecho".
Por ello, interpretan su muerte como un nuevo desafío a los demócratas, ante el cual advierten a los terroristas de que "jamás conseguirán sus objetivos" y les aseguran que "no doblegarán ni nuestro empeño de acabar con esa organización ni nuestras profundas convicciones democráticas en defensa del Estado de Derecho".
En este sentido remarcan que "a los autores de este atentado y al resto de terroristas sólo les espera la aplicación de la ley, la acción policial y el ejercicio de la justicia". También manifiestan que el agente del cuartel de Legutiano ha sido una "víctima inocente de la barbarie de ETA" que cumplía "con su deber de proteger la vida y los derechos de todos los ciudadanos". Este reconocimiento lo hacen extensivo a todos los miembros de la Guardia Civil "por la labor abnegada que realiza cada día y por el sacrificio permanente en defensa del Estado de Derecho".
El documento incluye otro párrafo en el que todos los partidos políticos apoyan y respaldan la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "a través de los cuales conseguiremos que los asesinos de Juan Manuel Piñuel sean detenidos, para que caiga sobre ellos todo el peso de la Justicia".
La declaración concluye con un llamamiento a los ciudadanos para que respondan "democrática y serenamente" al atentado, especialmente con las concentraciones de mañana en todos los ayuntamientos.
Sus firmantes son el PSOE, PP, CiU, PNV, ERC, BNG, CC, IU, ICV, Na Bai y UPyD, así como los sindicatos CCOO, UGT y USO, y las patronales CEOE-CEPYME.
Además de los portavoces parlamentarios de todas las fuerzas políticas, han estado presentes en la reunión el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, el secretario general del PP, Ángel Acebes, y los máximos dirigentes de la patronal y los sindicatos.