Los estudiantes de una escuela de Primaria toman apuntes mientras la profesora explica la lección.La comisión municipal de absentismo escolar podría llevar ante la Fiscalía de Sevilla 17 casos de niños con recalcitrantes ausencias a clase, una decisión que tendrán que tomar tras analizar ayer las cifras aportadas por los centros escolares del Polígono Sur, el primer barrio cuyos datos se han estudiado desde que este órgano echó a andar hace dos años.
La decisión de llevar ante el Ministerio Público casos de absentismo es la última medida de un plan para evitar que los niños se escapen de colegios e institutos, que comienza con planes de prevención y motivación de los alumnos. Para casos más graves existe la posibilidad de que los policías locales adscritos a la comisión vayan a casa de estos niños para preguntar por los motivos de sus ausencias e instar a sus familias a llevarlos a clase. Y si nada funciona, la comisión puede derivar el asunto a la Fiscalía de Menores, porque la escolarización es obligatoria y los padres cometen un delito de abandono familiar si no garantizan la asistencia a clase de los menores.
La Fiscalía varió hace unos años su política, hasta entonces poco activa en estos casos, y decidió perseguir estas situaciones en el marco de la colaboración con las instituciones educativas. Hace dos años, una familia de Torreblanca fue condenada a tres meses de cárcel por este delito, y la Justicia advirtió a los padres de que no sustituiría esta condena menor por una multa. La dejaría en suspenso, pero con una condición: si la hija volvía a faltar a clase, los padres ingresarían en prisión.
La delegada de Educación del Ayuntamiento, Esther Gil, explicó que de los 17 casos estudiados ayer de abstentismo grave, en los de Primaria el motivo suele ser que el entorno familiar no está comprometido con la escolarización, pero que en los casos de Secundaria las razones son más variables. Añadió que en los alumnos más mayores la comisión no sólo se preocupa por el abandono escolar, sino también por el fracaso en los estudios aunque el niño vaya a clase.
En el caso del Polígono Sur, con una población escolar de unos 2.400 alumnos entre los ocho colegios y los tres institutos, los 17 casos de absentismo grave suponen sólo un 0,7%, por lo que la propia Gil destacó que no se trata de cifras preocupantes.
Cierto es que puede ser el barrio en el que más se ha trabajado contra el absentismo en los últimos años, desde que el Plan Integral del Polígono Sur dotó a los centros de los instrumentos: en sólo un año, durante el curso escolar 2007/2008, se elaboró el primer censo de alumnos absentistas y se logró recortarlo a la mitad. De 397 casos se recuperaron 184 gracias a programas de apoyo escolar y familiar y a la insistencia con los padres. El eje de las medidas es una atención personalizada a cada niño para ayudarlo a sortear lo que le impide acudir a clase, hasta que el crío -y su familia- se acostumbre.
Una de las medidas que ha funcionado ha sido el Aula Abierta, que se aplica en dos institutos y permite a los profesores salir a la calle para buscar a alumnos que no pisaban la escuela, para enseñarles las materias imprescindibles. También se vincularon los beneficios sociales, como el alquiler de VPO o las ayudas económicas, a la asistencia habitual de los niños a clase. Fuentes educativas del Polígono Sur explican que en los últimos años el absentismo ha bajado mucho y se ha hecho "un buen trabajo", aunque insisten en que hace falta trabajar más con las familias.
78 personas para analizar los casos de absentismo
La comisión municipal de absentismo escolar se constituyó hace justo dos años gracias a un convenio entre el Ayuntamiento de Sevilla y las delegaciones de Educación y Bienestar Social de la Junta, con el objetivo de prevenir, realizar un seguimiento y controlar los casos de absentismo escolar.
Está formada por 78 miembros representantes de las delegaciones de la Junta implicadas -Educación y Bienestar Social-, las del Ayuntamiento -Educación, Convivencia y Seguridad y Bienestar Social- y directores y representantes de los padres de alumnos de los centros escolares que desarrollan programas contra el absentismo escolar en zonas con necesidades de transformación social, como el Polígono Norte, el Polígono Sur, Tres Barrios-Amate, Torreblanca, Palmete y El Vacie. También forma parte el Comisionado del Polígono Sur y el Consejo Escolar Municipal, según recordó ayer el Ayuntamiento.
En la comisión también hay representantes de las subcomisiones técnicas de distrito, 12 en total, que se corresponden con las unidades de trabajo social que hay distribuidas por la ciudad. Cada una de ellas tienen asignado un policía local que tiene potestad para iniciar de oficio los trámites para escolarizar a los niños que no lo estén. La comisión ya ha establecido contactos con la Fiscalía de Sevilla, para fijar una estrategia común, e incluso ha hecho un llamamiento a los médicos de cabecera para que no hagan justificantes falsos a los niños que falten.
Una base de datos para controlar mejor
La comisión de Educación creará una comisión de expedientes para un control más continuado de los casos que se vayan analizando y de su seguimiento, según explicó ayer Esther Gil. También se está preparando una base de datos que dote a la comisión de una mejor metodología de trabajo al aunar la información que llegue desde cada una de las comisiones técnicas y de la comisión de expedientes. Esto permitirá, en un futuro, elaborar estadísticas para contextualizar los datos de absentismo que se traten.