Tras un año de explosión del cine español adolescente, 2011 se presenta prometedor y variado, pero con dos claros protagonistas: la cuarta entrega del ex policía más casposo, Torrente, y el reencuentro de Almodóvar y Banderas.
Pero no son los únicos nombres destacados en un año en el que se estrenarán los nuevos proyectos de Daniel Sánchez Arévalo, Juan Carlos Fresnadillo -made in USA-, Fernando Trueba -de animación-, Nacho Vigalondo o Javier Fesser, con su tercer Mortadelo y Filemón.
La nueva aventura de los detectives más inútiles del cómic español llegará en 3D, al igual que el cuarto Torrente.
Santiago Segura vuelve a dirigir y protagonizar la saga más rentable del cine español. Y además de su inseparable Tony Leblanc, en este caso las colaboraciones se multiplican. Desde Kiko Rivera a Belén Esteban pasando por el Kun Agüero o Ana Obregón. Todos acompañarán a este machista y nostálgico del franquismo, que ahora está en crisis económica.
Un personaje y unas historias muy lejos de las que Almodóvar narra en sus películas, siempre complejas, siempre retorcidas y siempre sorprendentes.
En esta ocasión, la expectación aumenta por el reencuentro entre Almodóvar y Banderas. El malagueño es el doctor Ledgard, un eminente cirujano plástico que quiere crear una nueva piel gracias a los avances de la terapia celular, en La piel que habito, un filme inspirado en la novela Tarántula, del francés Thierry Jonquet.
El manchego ha puesto en pie una historia de terror pero sin sustos, como él mismo la ha definido, y con un reparto que incluye a Elena Anaya o Marisa Paredes.
Aunque para terror puro y duro Génesis, la precuela de REC, que dirigirá Paco Plaza.
Y como ejemplo de pura comedia para 2011, Primos, el tercer largometraje de Daniel Sánchez Arévalo tras Azuloscurocasinegro y Gordos. Una historia que relata el reencuentro de tres primos hermanos en el lugar de veraneo de su infancia.
Raúl Arévalo y Quim Gutiérrez son dos de los primos de un título que llegará a los cines el 4 de febrero, un mes después de También la lluvia, dirigida por Iciar Bollaín, que irá a los Óscar.
Luis Tosar y el mexicano Gael García Bernal protagonizan un drama que entrecruza la historia del rodaje de una película de Cristóbal Colón con la Guerra del Agua sucedida en Cochabamba en 2000.
Una película rodada en Bolivia, al igual que Blackthorn, en la que Mateo Gil se atreve con el western, con Eduardo Noriega.
Intruders, de Juan Carlos Fresnadillo, con Clive Owen, Daniel Brühl y Pilar López de Ayala, es un thriller con temática sobrenatural, mientras que Unknown, de Jaume Collet-Serra, toca lo dramático, con un Liam Neeson que sale del coma, al que nadie le reconoce.
Y en ciencia ficción mezclada con comedia, Nacho Vigalondo y su Extraterrestre, que promete una invasión alienígena a gran escala.
2011 tiene para todos los gustos.