Los municipios pequeños -400 con menos de 10.000 habitantes- podrán crecer por encima de los límites del Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía (POTA) y aplicar así la norma con flexibilidad. Es el compromiso que los alcaldes arrancaron a la Junta en la reunión del Pacto por la Vivienda.
Las demandas de la Federación Andaluza de Municipos y Provincias (FAMP) están "perfectamente fundadas y hay un acuerdo bastante alto" sobre las mismas. Es lo que vino a decir la consejera de Obras Públicas, Concepción Gutiérrez, tras un "positivo" encuentro del presidente Manuel Chaves con los alcaldes, principales actores para lograr que se libere el suelo necesario para construir las 300.000 VPO previstas por la futura ley de vivienda en la próxima década.
Los ayuntamientos lograron del Gobierno andaluz el compromiso de flexibilizar la interpretación del POTA -su mayor reivindicación- para evitar el "encorsamiento" urbanístico de los municipios. Junta y FAMP negocian que los pueblos pequeños puedan crecer por encima de los límites establecidos en la norma, es decir, el 30% de la población y el 40% del suelo urbanizable. "No es lo mismo analizar el 30% de una ciudad grande que de un municipio de 2.000 habitantes, donde hay que ampliar los límites de crecimiento", expuso Francisco Toscano, presidente de la FAMP.
Además, pidió establecer "escalones" para localidades de menos de 2.000 habitantes, menos de 5.000 y menos de 10.000 a la hora de modular los porcentajes del crecimiento. La titular de Obras Públicas apoyó esta propuesta argumentando que la mayoría de estos pueblos disponen de equipamientos superiores a las necesidades de la población real que tienen.
Los alcaldes también reclamaron, dentro de la suavización del POTA, que los suelos industriales queden fuera de esa limitación de crecimiento en los municipios pequeños. Además, apostaron por que la media de habitantes por vivienda -referente para el número de VPO- se rebaje, ya que actualmente son más los hogares de una persona que los de más de cinco miembros. Toscano abogó asimismo por abrir el abanico y crear otras figuras como la vivienda tasada, para "evitar el abismo" entre la VPO y la de renta libre.
Una vez más, los ayuntamientos recordaron que sólo el 7% de los municipios andaluces -55 de 770- se han adaptado ya a la Ley de Ordenación Urbana (LOUA), por lo que demandaron mecanismos "ágiles y fáciles" para que puedan crear las reservas de suelo para VPO que prevé la nueva norma. Toscano aclaró que esa reserva del 30% de la nueva edificabilidad se traduce en un 40% de las nuevas viviendas, "puesto que las VPO suelen ser más pequeñas" que otra tipología.
Igualmente, reivindicó poner fin al "calvario burocrático" y a los numerosos trámites administrativos necesarios para sacar adelante iniciativas municipales. El presidente de la FAMP espera que el Pacto por la Vivienda "abra una etapa nueva en el urbanismo andaluz", en la que las distintas administraciones puedan trabajar en común.
A la cita asistieron alcaldes de todos los partidos: Pedro Rodríguez (PP), de Huelva; José Antonio Barroso (IU), de Puerto Real; Félix López (PA), de Vera; y Tomás Herrera (PSOE), de Algeciras. Toscano aseguró que, "por encima del color político", todos los regidores coinciden en la necesidad de firmar el pacto.
Por último, Concepción Gutiérrez confió en que el pacto pueda estar cerrado antes de Navidad -fecha fijada por Chaves-, aunque matizó que "lo importante es el fondo, no la fecha".
