Al menos 55 personas fallecieron en el incendio registrado en una fábrica de colchones situada en la ciudad marroquí de Casablanca, según informó la agencia de noticias marroquí MAP, que cita fuentes de la waliya (Gobierno Civil) del Gran Casablanca.
Otras 12 personas, incluido un agente de la Policía, resultaron heridas por el fuego, declarado a las 10.00 horas en una fábrica perteneciente a Rosamor Ameublements, de cuatro pisos y situada en el barrio industrial de Lissasfa. El fuego se propagó rápidamente por toda la fábrica debido a los productos químicos inflamables que se almacenaban allí. En el lugar se encontraban trabajando unos cien trabajadores cuando comenzó el incidente.
El comunicado indica que los equipos de emergencia se presentaron rápidamente en el lugar, aunque el fuego no pudo quedar definitivamente extinguido hasta tres horas después a pesar de recibir refuerzos de elementos de protección civil y los distintos aparatos de seguridad. Autoridades locales también se personaron en la fábrica para supervisar las operaciones. Un responsable de la Fiscalía General acudió, por su parte, al lugar del incendio para iniciar una investigación sobre los hechos y determinar las responsabilidades.
Fuentes de la Protección Civil marroquí movilizó para la extinción del incendio a un centenar de bomberos, siete coches autobomba y cuatro ambulancias, agregaron las fuentes, dispositivos que no pudieron evitar una tragedia mortal.