La organización ecologista WWF España ha presentado esta mañana un informe en el que denuncia que, de las 1.700 nuevas hectáreas de cultivo bajo plástico puestas en valor entre 2003 y 2009 en el entorno de Doñana, casi 600 son ilegales, pues pertenecen a la llamada zona A. Este espacio queda recogido en el Plan de Ordenación del Territorio del Ámbito de Doñana (POTAD) como suelo de especial protección de los recursos naturales, lo que prohíbe la transformación en uso forestal y agrícola, como ha sido el caso. Esta "vulneración de la legalidad" ha sido detectada gracias al informe pagado por WWF y elaborado por una consultora independiente, Geosys S.L, que ha tomado imágenes de satélite de toda la superficie del Parque Nacional y sus alrededores. La creación de cultivos ilegales (de fresas, en su inmensa mayoría) supone "una pérdida de biodiversidad, la fragmentación del hábitat y la sobre-explotación del acuífero Almonte-Marismas", denuncia Enrique Segovia, director de conservación de WWF España.
