La directora general de Infancia y Familias de la Consejería para la Igualdad de la Junta de Andalucía, Carmen Belinchón, aseguró ayer que los 863 menores extranjeros no acompañados que se encuentran tutelados por la Administración autonómica "tienen iniciado y, en muchos casos finalizado, el procedimiento de declaración de desamparo".
Belinchón afirmó que el primer paso que da la Junta de Andalucía cuando un menor llega a las costas andaluzas es "declarar la tutela de hecho" para luego dar paso al procedimiento de tutela de derecho o declaración de desamparo formal, rechazando de este modo que la Administración autonómica "infrinja la ley" en este sentido, como apunta el Defensor del Pueblo Español, Enrique Múgica, en su informe de 2008.
Múgica denunció que la Junta incumple sistemáticamente la legislación al no declarar formalmente la situación de desamparo a menores no acompañados internados en centros de acogida. Belinchón respondió a esto que "no podemos declarar al menor en desamparo formal en el momento en el que llega a Andalucía porque hay que garantizar su derecho a la identificación y recabar toda la información posible sobre su familia. Ocurre que en más de una ocasión, cuando hemos iniciado el procedimiento de desamparo, lo ha reclamado su familia", explicó.