Operación última oportunidad es el lema de la nueva campaña que el director en Israel del Centro Simon Wiesenthal, Efraim Zuroff, lanzó en Buenos Aires para animar a los ciudadanos a colaborar con la organización proporcionando información sobre los criminales nazis que aún están escondidos en Sudamérica desde que huyeron de Europa tras la II Guerra Mundial.
El nuevo proyecto prevé una recompensa financiera de 10.000 dólares a quienes, en condición de anonimato si lo quisiesen, proporcionen informaciones sobre el paradero de los sospechosos a fin de promover su enjuiciamiento. Según datos del Centro, entre 150 y 300 nazis lograron instalarse en Latinoamérica, mayoritariamente en Argentina, Chile y Brasil, tras la derrota del Tercer Reich en 1945.
Por este motivo los responsables del Centro Simon Wiesenthal harán una gira en la que visitarán Santiago de Chile, Sao Paulo y Montevideo. Esta caza de nazis comenzó en 1992 con la finalidad de desenmascarar a los cientos de colaboradores del exterminio contra los judíos que habían huido a este continente.
Una larga lucha En 1960 agentes de los Servicios Secretos de Israel (Mosad) secuestraron en Argentina a Adolfo Eichman, jefe de las operaciones del transporte de judíos, que con el seudónimo de Clement trabajaba en una planta de automóviles. Otro de los criminales más buscados por el Mosad, el médico Joseph Mengele, conocido como el Ángel de la Muerte por sus experimentos con reclusos judíos y gitanos en Auschwitz, murió en Brasil después de refugiarse durante años en Paraguay. Entre los buscados se encuentra el doctor Aribert Heim, de quien se conjetura que estaría residiendo en España o en un país sudamericano, según el Centro Simon Wiesenthal.
