Se antojaba complicado rematar la faena a pesar del resultado ciertamente ventajoso de la ida y no estaban descaminados quienes pensaban así, y es que a estas alturas es complicado que este equipo coja por sorpresa a los suyos. El Betis local dista mucho de la efectividad del visitante y sin que Las Palmas propusiese un partido a tumba abierta sí que es cierto que a estas horas podríamos estar hablando de otro borrón copero, pero no es cuestión de mentar a bicha alguna, y es que no siempre el infortunio ha de vestir de verde y blanco... Pasamos página rápidamente sin olvidar los pocos matices desconocidos que ha revelado esta eliminatoria, y no es una buena noticia en tanto en cuanto parecía que con la Copa llegaría el momento para algunos futbolistas de ponérselo realmente complicado al entrenador. Nulo bagaje en los futbolístico y a ver por dónde sale el sol -sobre todo el arbitral- en el siguiente envite contra el federativamente muy poderoso Atlético de Madrid. Si es difícil meterle mano al bloque que Simeone ha compuesto alrededor de Falcao, más habrá de serlo si el habitual entorno colchonero pone la clásica maquinaria a funcionar a favor de su querencia. Llegan las aperturas de fechas y habrá que ver cómo responde el fondo de un armario preocupantemente disminuido por mor de las lesiones y de que la caja no da para que los fichajes de enero, de haberlos, lleguen cuando el entrenador quiere: ayer mejor que hoy.
