En unos casos son las condiciones impuestas en los pliegos que restan atractivo al negocio y, por tanto, a la inversión. En otros, la ausencia de financiación para poder afrontar las obras por el cierre del grifo del crédito. Y en unos terceros, la falta de rentabilidad ante unos cánones no compensados con los ingresos. Sea como fuere, lo cierto y verdad es que al alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, le fallan las empresas, que huyen de los concursos municipales dando así al traste con no pocos compromisos adquiridos con el electorado.
La frustración quizás más sonora por su envergadura económica ha sido la de los aparcamientos subterráneos de la plaza San Martín de Porres y la glorieta de El Cid, pero a la nómina se agregan el Museo de las Tradiciones, el Costurero de la Reina, dos promociones de VPO de Emvisesa, quioscos con veladores en parques públicos y el último, conocido ayer mismo, la plataforma digital prometida para apoyar a los emprendedores y de asesoramiento a los empresarios.
Y no era una plataforma más, recordó ayer la concejal socialista Susana López, sino que fue concebido al inicio del curso político como el principal proyecto del regidor en materia de empleo, aunque su presupuesto, ni 60.000 euros, queda muy por debajo de los 6 y 6,5 millones de euros que costaban los citados parkings.
La suspensión de ese proyecto on line, cuya aspiración era dar soporte a los emprendedores en sus ideas para que prosperaran en empresas, está motivada porque ninguna de las dos empresas invitadas por la Delegación de Economía del Consistorio hispalense para participar en el concurso reunía los requisitos necesarios para lanzar la plataforma digital. Es decir, que ni siquiera eligiendo previamente a las compañías se ha tenido el éxito garantizado.
Para López, la partida consignada, 59.290 euros, era insuficiente, al tiempo que sostiene la gestión del proceso por parte del delegado del área, Gregorio Serrano, ha dejado mucho que desear, y se ha vuelto a demostrar, asimismo, la falta de planificación y de una estrategia adecuada del gobierno de Zoido. La plataforma comenzó su tramitación en agosto de 2012 y hasta un año después en septiembre pasado no se licitó, aprobándose por la vía de urgencia con un plazo de seis días para la presentación de ofertas mediante fórmula negociada y sin publicidad. Al final, con dos empresas se habló, y ninguna satisfizo las condiciones. Desierto, pues, el concurso para una iniciativa on line que, según el propio Ayuntamiento, atendería a alrededor de 1.600 emprendedores sevillanos al año.
Pecata minuta, alega la contraparte política. Gregorio Serrano replicó, vía comunicado, que ya están perfectamente atendidos a través de diferentes diferentes programas y proyectos. La plataforma digital es un medio más de asesoramiento a la que este gobierno no renuncia ni mucho menos, se va a poner en marcha. Se anuncia que habrá otra convocatoria de concurso. Mejorada y adaptada a las circunstancias del mercado. Y mientras tanto sostuvo, el asesoramiento sigue garantizado a través de los programas Sevilla Emprendedora, al que acuden centenares de emprendedores todos los meses, Sevilla Capital Inteligente, un proyecto sin precedentes en colaboración con las principales instituciones que apoyan el emprendimiento en nuestra ciudad; y la Ventanilla Única Empresarial, junto con la Cámara de Comercio.
REGUERO. Pero el reguero de proyectos frustrados es amplio y pesará en la precampaña electoral.
Así, la empresa promotora del proyecto de Museo de las Tradiciones, que iba a incluir la muralla almohade de la Torre de la Plata, dedicado a la Sevilla más folclórica y para el que ya incluso se había colocado precio de entrada, ha dado la espantada, se ha retirado del proyecto y no existe otra compañía interesada. Se tendrá que reconsiderar la cuestión y abrir un proceso participativo para determinar qué se quiere hacer.
Compuesto y sin novia también se acaba de quedar el Costurero de la Reina. Van dos concursos públicos para explotar el edificio, de estratégico enclave a los pies del parque de María Luisa y del palacio de San Telmo, con fines turísticos, y ambos baldíos. Nulo fue el interés mostrado. Ahora se adjudicará de forma directa si es que alguien finalmente percibe que existe potencial negocio.
Desde Emvisesa, y descartado el ambicioso plan de Zoido de construcción masiva de VPO por la crisis económica y el pinchazo inmobiliario, tampoco se sabe nada de la pequeña promoción (16 pisos) en la Ronda de Capuchinos sobre un solar municipal, y que era lo único previsto para 2013.
En cuanto a los aparcamientos subterrénaos, se declararon desiertos los concursos para los de El Cid y San Martín de Porres se negocia cómo reconducirlos pero tampoco hay nada concreto sobre los otros anunciados Luis Montoto, que se cambiará de ubicación, Macarena y el sobrevenido de la Alameda de Hércules. Y la sombra se extiende sobre ellos, al igual que se reducirá la inversión privada que se preveía en el mercado gourmet de la Puerta de la Carne y afloran dudas sobre el futuro del megaproyecto de ocio llamado Paseo del Arte a lo largo del río Guadalquivir.
Para Susana López, en la gestión de Zoido, en especial en materia de empleo, se acumulan los golpes de efecto que después no se traducen en nada. Cuando se reconoció que el Consistorio se quedaba sin constructoras para los parkings, se defendió arguyendo que los intereses de los sevillanos estaban por encima de los concursos y de las compañías y sostenía que todo se fue al garete por la falta de crédito, argumento este último, culpar a la banca, también usado para justificar la demora en adjudicar VPO.
